Por Javier Ciappina Redacción EL TIEMPO

Los doctores Diego Azcona, director del Hospital Municipal, y Víctor Bernardi, jefe del Servicio de Hemodinamia que funciona en el Pintos, brindaron detalles acerca de un innovador procedimiento, utilizando un novedoso dispositivo intracoronario, que se llevó a cabo el martes por primera vez en Azul. Entre otras cuestiones, los profesionales destacaron que se trata de una técnica que comenzó a utilizarse recientemente en el mundo y que en el centro de salud local ya comenzó a desarrollarse.

"Un servicio que viene creciendo mes a mes"

- ¿Se puede decir que el Servicio de Hemodinamia es uno de los sectores que más ha crecido en el último tiempo dentro del Hospital Pintos?

- Dr. Diego Azcona: Sí, es un servicio que viene creciendo mes a mes. Estamos cumpliendo casi dos años de trabajo. Se van proyectando etapas y se va avanzando en el cumplimiento de objetivos.

Ahora cumplimos un objetivo más, con un innovador tratamiento que se le puede brindar a la comunidad a través del servicio.

- ¿Cuáles son las características de este tratamiento?

- Dr. Víctor Bernardi: Lo que hicimos es utilizar un dispositivo nuevo intracoronario -aunque puede ser de otros territorios, como carotideo o de miembros inferiores- que se llama de litotricia. Es parecido a la renal, pero en este caso es intracoronario.

Este dispositivo tiene algunas particularidades, pero básicamente se utiliza para arterias que están muy calcificadas -la placa aterosclerótica tiene un grado de consistencia prácticamente como si fuese una piedra- y a las cuales -con los dispositivos habituales- no se puede acceder a su apertura para la colocación del stent o de la prótesis que normalmente colocamos.

Sería como un facilitador que nos abre el camino para poder abrir la arteria coronaria y -en un segundo paso- implantar la prótesis, que es el stent.

Este dispositivo se llama shockwave y, básicamente, es un balón que tiene emisores, en su interior lleva solución fisiológica y desde una consola externa se disparan pulsos de electricidad de 3.000 voltios. Esa energía se transforma en burbujas cavitarias que generan una onda de sonido, la cual -en contacto con la pared del bazo- produce la ruptura de esa placa tan dura. Esa ruptura de piedra nos facilita cambiar la geometría del bazo, acceder con la prótesis y dilatar el bazo al diámetro que necesita el paciente.

"Es un dispositivo nuevo en el mundo"

- Se trata de un dispositivo realmente innovador...

- Dr. Bernardi: Sí, es un dispositivo nuevo en todo el mundo. En agosto tuvimos el Congreso Latinoamericano de Cardiología Intervencionista, el cual se realizó en Buenos Aires, y allí se desarrollaron casos en vivo prácticamente por primera vez en Argentina. Y nosotros lo estamos implementando en Azul casi un mes después.

El dispositivo es bastante sencillo y se trata de un "upgrade" (mejora, ampliación, actualización) del balón convencional que usamos normalmente para hacer una angioplastia. A ese balón se le agregaron los emisores y la consola externa que tiene pulsos, la cual el médico maneja desde afuera con una botonera para disparar esos 12 pulsos que cambian la impedancia del bazo. Esa frecuencia de onda es la que finalmente logra la ruptura de la placa.

- ¿Esta tecnología va a permitir que muchos pacientes puedan acceder a tratamientos que hasta poco tiempo no tenían a su alcance?

- Dr. Bernardi: Nosotros estamos haciendo todos los tratamientos que se hacen en cardiología intervencionista en el mundo.

Las distancias se acortaron, razón por la cual tratamos de replicar lo que se hace en el mundo.

El cambio fundamental que hizo el Hospital Pintos con esta gestión es instalar este servicio y poder resolver los pacientes de urgencias, las cuales principalmente se relacionan con los infartos.

Por esa razón contar con este servicio es fundamental. Tenemos un médico, que es el doctor Federico Fernández Viña, que está 24-7 a disposición para atender a los pacientes de urgencia.

Los doctores Víctor Bernardi, jefe del Servicio de Hemodinamia que funciona en el Pintos, y Diego Azcona, director del Hospital Municipal, brindaron detalles acerca de un novedoso tratamiento que comenzó a realizarse en el centro de salud local. FOTO NICOLÁS MURCIA

Los pacientes que llegan con un infarto normalmente no poseen esa complejidad de tener la placa tan dura y se les salva la vida abriéndoles el bazo. Pero para los pacientes que son crónicos y que tienen la placa aterosclerótica con la consistencia de hueso -para poner una referencia-, sí es muy útil este dispositivo que utilizamos por primera vez aquí en Azul.

Se trata de aggiornarnos a la evolución médica permanentemente.

Nosotros estamos haciendo aquí casi todos los procedimientos y hay algunos nuevos que estamos trayendo. Hacemos endoprótesis aórtica (reparación de toda la aorta abdominal y torácica), embolización de aneurismas cerebrales, todo lo que es coronario y carotideo, angioplastias periféricas de los miembros inferiores y estamos tratando de incorporar la parte de electrofisiología, que es lo que se viene ahora. Esto último tiene que ver con los marcapasos, con las arritmias. No se relaciona solamente con implantes de marcapasos sino también con un equipamiento que sirve para hacer ablaciones en el caso de que el paciente tenga -por ejemplo- una arritmia. Para eso se utiliza un dispositivo especial, que es el sistema de ablación tridimensional, el cual también es bastante nuevo en el mundo y que lo estamos trayendo a Azul.

"La enfermedad cardiovascular es la segunda pandemia"

- Esto da cuenta de la importancia que tiene el Servicio de Hemodinamia para el Hospital Pintos y para la comunidad de Azul.

- Dr. Azcona: Tenemos que partir de la base de que la enfermedad cardiovascular es la segunda pandemia. Hoy por hoy lo estamos viendo en poblaciones mucho más jóvenes. La edad se acorta. Nosotros lo pensábamos para después de los 60 o 70 años, pero actualmente tenemos pacientes de edades que se consideran como adultos jóvenes, 45 o 50 años.

Esa patología la tenemos presente y la tenemos resuelta en lo inmediato, no solamente para la población de Azul sino también para el sistema de derivación. El Hospital Pintos -y sobre todo el Servicio de Hemodinamia- tiene referencia con otras ciudades y permite trabajar de la misma forma en las urgencias y en lo programado.

- Dr. Bernardi: Son aproximadamente 18 millones de personas las que mueren por año por enfermedad cardiovascular. Y el 85% de esas personas, son por infartos. Después de la pandemia y de los accidentes de tránsito, la enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte.

Eso se reduce con el diagnóstico precoz y teniendo un equipo médico trabajando 24 horas los siete días de la semana. Eso es lo que logramos en Azul hace ya dos años.

"El paciente evolucionó perfectamente"

- ¿Este servicio está a la altura de cualquier otro que pueda funcionar en el mundo?

- Dr. Bernardi: Exactamente. Nosotros somos un grupo grande y hay procedimientos que los hacemos en conjunto. Viene gente de Buenos Aires, pero el 80 o el 90 por ciento de los casos en agudos se resuelven en el Hospital Pintos y con los médicos de acá.

- ¿Cómo se encuentra el paciente que tuvo esta intervención tan novedosa?

- Dr. Bernardi: En realidad el paciente no nota nada, porque es una punción normal. En este caso fue una punción femoral y con un catéter convencional para angioplastia. Lo único que se cambió fue el catéter balón especial, el que se denomina de shockwave o de litotricia coronaria.

El paciente evolucionó perfectamente. Logramos hacer el procedimiento, se rompió esa placa dura de consistencia de hueso y pudimos implantar el stent, que era lo que nosotros necesitábamos. Ya habíamos intentado una vez y no habíamos podido, porque con los dispositivos habituales no cedía la consistencia de la placa.