Por Javier Ciappina Redacción EL TIEMPO

La delegada de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires con sede en Azul, Yanina Moulia, dialogó con EL TIEMPO, y -entre otras cuestiones- brindó detalles acerca de las diferentes acciones que se están llevando adelante desde la oficina local del organismo.

En ese marco explicó el trabajo que están realizando para atender los diversos reclamos de los azuleños, destacando la importancia de estar cerca de la gente y ofrecer un acompañamiento eficaz en temas que afectan directamente a la vida cotidiana de los vecinos.

Multas, obras sociales y medicina prepaga

En el inicio de la charla con este diario, Moulia comentó que los asuntos viales siguen siendo una de las principales inquietudes que reciben actualmente. "Uno de los reclamos más comunes está relacionado con las infracciones de tránsito a nivel provincial, principalmente en rutas", contó. La titular de la Defensoría explicó que muchas veces las personas no son notificadas de las infracciones y se enteran cuando intentan renovar su licencia de conducir o vender un vehículo. "Nosotros les brindamos asesoramiento, hacemos los descargos necesarios y tramitamos las boletas de pago voluntario", agregó.

Otro de los temas recurrentes en la oficina es el relacionado con las obras sociales. "Hay varias negativas con el tema de las prestaciones y las demoras en cirugías o en la entrega de prótesis. A muchas personas también les niegan la afiliación, lo cual principalmente se da en monotributistas o en trabajadoras de casas particulares, lo que llaman pequeños contribuyentes", explicó Moulia.

La oficina local de la Defensoría del Pueblo bonaerense está ubicada en Necochea 669 y se encuentra abierta para la atención al público de lunes a viernes en el horario de 8 a 14. Foto: NACHO CORREA

La funcionaria también indicó que -a través del DNU 70/23- se modificó la regulación de las obras sociales y de medicina prepaga y "luego se creó un registro de agentes de seguro de salud, donde se tenían que reempadronar las obras sociales y los agentes de medicina prepaga que tomarían a estos pequeños contribuyentes. Hubo un periodo -entre la ley y la reglamentación- en el cual hubo un vacío y posteriormente se empezaron a incorporar, pero siguen teniendo siempre las mismas problemáticas".

"Muchas veces, a las personas que intentan afiliarse a una obra social se les niega el acceso debido a que les dicen que no hay cupo disponible, que no los pueden tomar, y la realidad es que como son pequeños contribuyentes tratan de eludir su afiliación", comentó Moulia, y añadió que ante casos de esas características, la Defensoría toma los reclamos y le da intervención a la Superintendencia de Servicios de Salud para tratar de resolverlos.

Reclamos por servicios públicos

Por otro lado la delegada local de la Defensoría del Pueblo bonaerense mencionó que los reclamos por servicios públicos no son tan frecuentes como en años anteriores pero indicó que "siempre hay alguno por cuestiones de facturación o por errores en la medición, aunque no son tan habituales como antes".

En particular, mencionó los problemas relacionados con la segmentación tarifaria, en la que muchos usuarios descubrieron que su categoría había cambiado de un mes para otro. "Nosotros hacemos el reclamo, verificamos la inscripción para ver si es la que corresponde y le damos intervención a la Cooperativa o a Camuzzi para que verifiquen si la categoría sigue siendo la misma y para que refacturen en los casos que corresponda", informó.

Asimismo, Moulia expuso que "nosotros tenemos intervención a nivel provincial y no en lo nacional. De todas formas, cuando podemos dar alguna resolución en temas de ese ámbito, la damos. Generalmente derivamos estas cuestiones a la Defensoría Federal, desde donde se realiza una intervención judicial cuando corresponde".

"El boca en boca"

Un aspecto importante que destacó Moulia es que, a pesar de contar con varios canales de comunicación, como redes sociales, página web y teléfono, la mayoría de las personas llegan a la Defensoría por "el boca en boca". "Los vecinos se acercan principalmente porque alguien les contó que en la Defensoría los ayudaron con un problema de similares características. Ese contacto directo sigue siendo fundamental", expresó.

Igualmente la funcionaria apuntó que "mucha gente habitualmente se confunde la Defensoría del Pueblo con la Oficina de Defensa del Consumidor, las cuales van por caminos separados. En la OMIC abordan cuestiones de consumo de bienes o servicios y nosotros hacemos reclamos contra el Estado o entidades dependientes del mismo. No tenemos la misma intervención, pero mucha gente se acerca pensando que somos lo mismo y por eso la derivamos".

A modo de ejemplo Moulia especificó que "en la oficina recibimos a muchas personas que vienen a reclamar porque les aumentó el celular o el cable, o porque le ofrecieron una promoción que después no cumplieron. Esos casos directamente los derivamos a la OMIC, que es la oficina competente y que además tiene la facultad de convocar a una audiencia o de aplicar una sanción, la cual nosotros no tenemos".

Trabajo en el territorio

En otro tramo de la entrevista mantenida con este diario, la delegada local de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires hizo hincapié en que el organismo no sólo actúa como una oficina de recepción de reclamos, sino que también realiza una importante labor territorial. "Además de tener una oficina local, participamos en mesas de trabajo interinstitucionales sobre diferentes temáticas, como las de violencia de género, hábitat, niñez y discapacidad", sostuvo. Este trabajo permite coordinar políticas públicas que abordan de manera integral las problemáticas de la comunidad.

"Esa actividad quizás no se ve tanto porque es interinstitucional. También hacemos talleres, capacitaciones y coordinamos con educación y con asociaciones civiles", refirió.

Además Moulia manifestó que desde la Defensoría se está llevando a cabo un fuerte trabajo con las asociaciones civiles de la comunidad, a través de un convenio con la Dirección de Personas Jurídicas.

"Esa es una gestión que venimos desarrollando desde hace unos años y nos da también otro contacto, el cual no se relaciona con una persona individual sino con un grupo colectivo que realiza otro tipo de actividades en la ciudad, como -por ejemplo- los clubes de barrio, los centros de jubilados, las sociedades de fomento y las instituciones culturales", resaltó la funcionaria.

Según dio a conocer la delegada local: "Azul tiene muchas asociaciones civiles. Hemos ido conociendo a varias y son más de 80 a las que hemos asesorado. No es sencillo porque no es una sociedad comercial que tiene un equipo de profesionales que se dedica a la documentación. Es un grupo humano que tiene ganas de hacer alguna actividad deportiva o cultural y que no cuenta con un contador o un abogado que le lleve los trámites. Y, en muchas ocasiones, el tema de los papeles es el más engorroso".

Igualmente aseveró que "a las organizaciones civiles, el hecho de contar con un certificado de vigencia, las habilita a suscribirse a programas a nivel provincial, nacional y municipal; a solicitar subsidios; recibir donaciones; realizar facturación; tener una cuenta bancaria al día. Son muchos los beneficios que esto conlleva. Pero tienen que celebrar las asambleas, hacer las actas, llevar los balances y demás. Por eso las vamos asesorando en todos esos aspectos".

"Nuestro objetivo es estar cerca"

Sobre el final de la charla con este medio, Moulia dejó en claro que uno de los objetivos más importantes del trabajo de la Defensoría es estar cerca de la gente. "La idea es seguir acercándonos al territorio con las propuestas que vayan surgiendo, que los vecinos conozcan a la Defensoría y que se acerquen. Si no podemos llevar adelante su reclamo vamos a asesorarlos acerca de la vía por la que pueden transitar", aseveró la funcionaria, para inmediatamente después añadir que "somos un organismo provincial, autárquico, que no depende de ninguno de los tres poderes. Tenemos 63 delegaciones en toda la provincia, contamos con un canal de atención las 24 horas, WhatsApp y redes sociales. Estamos atendiendo todo el tiempo".

A su vez, la titular de la Delegación Azul de la Defensoría del Pueblo bonaerense puso énfasis en que "la idea es que no haya distancia entre el ciudadano que necesita resolver un problema y nosotros. Nuestro objetivo es estar cerca de los azuleños".

Finalmente Moulia comunicó que la oficina local -ubicada en Necochea 669- se encuentra abierta para la atención al público de lunes a viernes en el horario de 8 a 14. Los interesados también se pueden comunicar a través del siguiente número telefónico: 434948.