En respuesta a sendos recursos de apelación que terminaron siendo desestimados, desde la Cámara Penal fueron confirmadas las prisiones preventivas de dos hermanos a los que acusan de haberle robado a un joven una moto mediante el empleo de un arma blanca.

Ese hecho había ocurrido meses atrás, luego de que ambos imputados se presentaran en la casa de la víctima con la excusa de comprarle el rodado.

Los dos encausados permanecen privados de la libertad desde el pasado mes de octubre, cuando en Azul resultaron detenidos por personal policial como los probables autores del ilícito que les continúan atribuyendo en carácter de coautores.

En el caso de uno de ellos, también le imputan el delito de "encubrimiento", luego de que meses atrás, cuando fuera allanado el inmueble donde se domiciliaba, efectivos de seguridad incautaron en aquella diligencia el motor de otra motocicleta que le había sido sustraída a una vecina en agosto de este año.

Los acusados fueron identificados por voceros judiciales como Elías Ezequiel Pavón, de 18 años de edad, y Alexis Peralta (25).

Tras conocerse las resoluciones desde la Alzada departamental que confirmaron las vigencias de las prisiones preventivas para ambos, esos jóvenes continúan acusados del delito de robo agravado por el uso de arma. Y en el caso del menor de los hermanos, "en concurso real de acciones" le imputan también ese otro ilícito ya mencionado de encubrimiento.

En el marco de la instrucción de una causa penal radicada en la UFI 13 que en los tribunales de Azul está a cargo del fiscal Adrián Peiretti, las detenciones de los hermanos habían sido ordenadas por el magistrado Federico Barberena desde el Juzgado de Garantías 2.

Ambas medidas cautelares las hicieron efectivas en Azul agentes policiales el pasado 22 de octubre.

En tanto, el 14 de noviembre de este año el mencionado Juez garante convirtió a las detenciones de los jóvenes en respectivas prisiones preventivas, las cautelares que durante el transcurso de la semana anterior quedaron ratificadas para los investigados por parte de los miembros de la Cámara Penal con asiento en el tercer piso del Palacio de Justicia de Azul: Carlos Pagliere (h), Agustín Echevarría y Damián Cini.

En ambos casos desde Defensorías Oficiales, ante la Alzada departamental habían sido formulados sendos recursos en busca del cese de las prisiones preventivas de los encausados.

Pero en esta instancia de revisión del sumario penal, analizando las evidencias incorporadas a ese expediente se resolvió desestimar esas apelaciones y, en consecuencia, ratificar la decisión por medio de la cual los hermanos continúan privados de sus libertades en una unidad penal de la zona.

Conclusione

A modo de denominador común de las resoluciones que desde la Cámara Penal terminaron confirmando las vigencias de las prisiones preventivas de los hermanos, en ambos casos se tuvieron en cuenta -como circunstancias para fundamentar de manera unánime dichas decisiones- la gravedad del hecho que al parecer cometieron y el "alto monto de pena" de prisión que contempla, ante eventuales condenas, el delito por el que se iniciara esta Investigación Penal Preparatoria.

De esa manera, esos recursos en busca de revocar las prisiones preventivas dictadas en una primera instancia el mes anterior a los jóvenes Pavón y Peralta terminaron siendo rechazados por "improcedentes".

Con relación al robo de la moto que les imputan a los hermanos, en una de las resoluciones el camarista Cini escribió: "En cuanto a la gravedad objetiva de los hechos, tengo especialmente en cuenta el accionar conjunto por parte de Peralta y el coimputado Pavón, quienes engañando a la víctima se trasladaron en forma conjunta a bordo de sus motovehículos para, una vez alejados del domicilio de ésta, desapoderarla de su rodado mediante golpes y con la utilización de un elemento cortopunzante".

Tras resultar detenido, Elías Ezequiel Pavón había declarado cuando fue llevado a sede judicial para ser indagado por el Fiscal que le atribuye coautoría en el robo de la referida motocicleta.

A través de su relato, ese joven afirmó que era ajeno al hecho por el que su prisión preventiva quedó ratificada desde la Cámara Penal departamental.

Al respecto, en el recurso presentado desde una Defensa Oficial y que terminó siendo desestimado en esta segunda instancia se pedía que se valorara su versión -en ocasión de declarar a tenor de lo que establece el artículo 308 del CPP- para que fuera excarcelado.

En contraposición a lo afirmado por ese joven al ser indagado, para confirmar su prisión preventiva se tuvo en cuenta lo declarado por la víctima del robo de su motocicleta, quien -escribió el juez Pagliere (h) en lo resuelto- "describe pormenorizadamente la secuencia de los hechos, dando detalles de los mismos, resultando coherentes y verosímiles sus dichos y no advirtiéndose motivos que hagan presumir que quiera perjudicar falsamente al imputado con una denuncia de tal entidad".

El actual titular de la Cámara Penal concluyó también que ese joven al que le robaron de manera violenta su moto había sido "claro y determinante al indicar que Pavón y Peralta se presentaron en su domicilio a bordo de un motovehículo, a los fines de comprarle el suyo (previamente publicado en un grupo de WhatsApp), y que le ofrecieron por el mismo una determinada suma de dinero más un teléfono celular, efectos que debían retirar del domicilio de los coimputados para concretar el negocio".

Luego de que ambos hermanos concurrieron a la casa del joven que tenía a la venta su vehículo, el día de sucedido en horas de la tarde ese hecho -19 de agosto de este año- "los tres se dirigieron en los dos rodados hacia el domicilio de los imputados".

Mientras que la víctima conducía la moto que tenía a la venta y llevaba como acompañante a Peralta, Pavón transitaba en esa otra en la que -junto con su hermano- había llegado hasta la casa del damnificado por lo sucedido.

En esas circunstancias, "al llegar a las intersecciones de calles Jujuy y Belgrano, Peralta lo obliga (al damnificado y después denunciante de lo que pasó) a abandonar el rodado a través de frases amenazantes y valiéndose de la utilización de un arma blanca, apropiándose de su moto y emprendiendo la huida junto con Pavón", se menciona en una de las resoluciones que terminaron confirmando las prisiones preventivas para los investigados por ese robo ocurrido hace cuatro meses.

Aquel 19 de agosto pasado, un testigo observó el accionar desarrollado por ambos hermanos en la vía pública en perjuicio del damnificado por el violento asalto. Y ese momento en que la víctima era despojada de su motocicleta había quedado registrado también en cámaras de seguridad cuyas grabaciones luego serían incorporadas como evidencias a la causa penal por la cual Peralta y Pavón siguen privados de sus libertades.

"Elías Ezequiel Pavón tomó parte en el plan, consistente en desapoderar (al joven asaltado) de su motovehículo. Ello, por cuanto no sólo trasladó en su rodado al coimputado Peralta al domicilio de la víctima, sino que aguardó junto a él en el lugar, participó en las supuestas negociaciones, se movilizó a la par de éste, esperó que Peralta ejecutara el desapoderamiento y, finalmente, también en forma conjunta, pero en rodados diferentes, emprendió la huida", puede leerse en una de las resoluciones más recientes vinculadas con esta causa.

Al mismo tiempo, en la Cámara Penal quedó descartada la versión de Pavón por mendaz, cuando al ser indagado afirmó que había sido ajeno a ese robo de la moto por el que sigue preso.

"Los dichos vertidos por el encausado Pavón -afirmando no haber participado en el hecho más gravoso- quedan totalmente desvirtuados", puede leerse en lo resuelto para ese joven, valorándose en contraposición a lo declarado por él lo que dijeran la víctima del robo de su moto y un testigo, al igual que lo observado en el ya mencionado registro de una cámara de seguridad perteneciente a un comercio, instalada en un sector cercano a la Costanera, en inmediaciones donde aquel ilícito sucediera en agosto pasado.

A la motocicleta que le siguen atribuyendo haber robado de manera conjunta a ambos hermanos los investigadores pudieron recuperarla y devolvérsela a su propietario.

Cuando lo hallaron, el rodado estaba en poder de un varón mayor de edad que había afirmado que, a un valor muy inferior al que en realidad tiene, se lo había comprado a uno de los jóvenes que sigue preso.

El dato

De acuerdo con lo señalado ayer a EL TIEMPO por voceros allegados a la instrucción de este sumario penal, actualmente Elías Ezequiel Pavón y Alexis Peralta están presos en la Unidad 38, una de las cárceles del complejo penitenciario ubicado en la localidad olavarriense de Sierra Chica.

El motor de una Motomel

El hecho de "encubrimiento" que también le atribuyen al menor de los hermanos investigados, situación por la que días atrás su prisión preventiva también se confirmó, surgió -tal lo ya mencionado- del allanamiento que meses atrás policías realizaran en la casa de esta ciudad donde se domicilia.

Aquella diligencia había finalizado con el hallazgo del motor de una motocicleta que, también en agosto de este año, le había sido sustraída a una vecina, luego de que al vehículo lo dejara estacionado en las afueras del club Boca Juniors.

El robo de esa moto data del 15 de agosto de este año. Y en las actuaciones penales se menciona que luego Elías Ezequiel Pavón "adquirió o recibió" -sabiendo de su procedencia ilícita- "al menos un motor" perteneciente a una Motomel que a la mujer le había sido sustraída.

A ese rodado la vecina damnificada, minutos después de la hora 20 del 15 de agosto pasado, se lo sustrajo un sujeto que después se lo llevó de tiro, en momentos que ella lo había dejado estacionado -con la traba de su manubrio colocada- en las afueras del club Boca Juniors, sobre las calles Belgrano entre Arenales y Rauch.

Aquel mismo mes de sucedido ese ilícito en perjuicio de la mujer, al ser allanada una casa situada sobre la calle San Juan donde Pavón se domiciliaba fue posible hallar el motor del vehículo sustraído en las inmediaciones de la sede social de Boca. Y durante aquella diligencia los efectivos policiales recogieron más autopartes de motos que serían de procedencia ilícita.