Por Catalina Pace Especial para El Tiempo

Tiene mucho para contar, desde su vida en Azul hasta hoy. Jugó el Mundial de streamers, vivió el campeonato en Qatar y todavía va por más.

"Jose" Valicenti mantiene los pies en la tierra, pero su imaginación y su ambición por ir siempre en busca de lograr sus objetivos hacen que su mente vaya más allá de todo. Es la más chica de tres hermanas y, desde pequeña, se pasa el tiempo haciendo cosas que le gustan. Cuando todavía vivía en Azul estaba mucho tiempo en el Club de Remo haciendo todos los deportes que pudiera por día, se juntaba con sus amigos y compartía tiempo con su familia. Tuvo la mala suerte de perder físicamente a su mamá años atrás, pero siempre la mantiene presente, de todas maneras.

Un día marchó hacia Buenos Aires, para estar cerca de su querido River Plate y, más que nada, para estudiar la carrera de Kinesiología. Siguió haciendo deporte y continuó con hockey, desde entonces en el Club Champagnat. De todas formas, en 2019 jugó una temporada en el equipo Villa Primrose de Francia y, luego de eso, regresó al país.

Tiempo después, tomó otro rumbo y se dirigió a ser futbolista de Excursionistas, donde debutó en Primera División el 21 de agosto de 2021. Actualmente, con estas experiencias en su haber, concluye en que fueron completamente distintas, que el tipo de relación con sus compañeras era diferente y que, por supuesto, vivió situaciones importantes en cada una.

Por otro lado, con la facultad avanzó, creció y hasta realizó prácticas con profesionales que forman parte del cuerpo técnico del "Millonario". El 4 de diciembre de 2020 pudo finalizar su ciclo universitario y festejar con sus seres queridos, quienes estaban presentes en ese día tan fundamental de su vida, como así también en todo momento.

Le importa compartir tiempo con su gente siempre que puede, ya sea con sus amigos o con su familia, en Buenos Aires, en Azul o en cualquier parte del mundo. Le gusta hacer planes, estar activa y realizar ejercicio, cosas que la mantienen con una alegría que la caracteriza. Cuando todavía estábamos encerrados en nuestras casas por la pandemia, Josefina grabó un video para Tik Tok, en la cual se la veía jugando con una pelota de fútbol. Recuerda que lo hizo como para "boludear", pero se hizo bastante viral.

Siguió subiendo más contenido a sus redes sociales, sobre todo a esa aplicación, en la cual se mostraba realizando habilidades con la pelota en el patio de su casa. Se animó a publicar también en Instagram diversos tipos de cosas, como cuestiones de kinesiología, de su día a día y demás. De hecho, con el tiempo comenzó a entrenarse en un gimnasio muy conocido en Buenos Aires y mostraba algunas rutinas haciendo actividad física.

En un entrenamiento, realizó los ejercicios con uno de los chicos de ahí y le comentó que le gustaba como entrenaba. Le dijo que desde Under Armour, marca deportiva, estaban buscando gente para sponsorear y que si le interesaba podía mandarle su contacto. Automáticamente, Josefina dijo que sí y a los días se comunicaron con ella para que, si quería, pasara por la oficina de la empresa a charlar.

"Fui después de trabajar, llegué con el ambo y les empecé a contar de mi vida personal como me pidieron. Les hablé desde cuando vivía en Azul y todo lo que hacía allá, hasta lo que en ese momento estaba realizando en Buenos Aires", destacó Valicenti. Su historia los atrapó y, en ese instante, le ofrecieron formar parte de la marca. Con una respuesta afirmativa por su parte, enseguida le entregaron calzado e indumentaria para que lo muestre en los contenidos que generaba. De todas formas, aclaró lo siguiente: "Nunca me pidieron que suba algo específico, me dejan jugar mucho con lo que me gusta a mí, pero les voy consultado que sí y que no. Y vivo con su ropa puesta porque realmente me parece excelente".

Como si fuera poco todo lo que hacía, comenzó a realizar transmisiones por Twitch. Se empezó a hacer más conocida y la llamaron para jugar la Liga de fútbol de streamers, a la cual ingresó como TikToker y creadora de contenido. No sólo salió campeona, sino que fue elegida como la mejor jugadora del torneo y, además, sostuvo que la ayudó un montón a crecer y a seguir entendiendo el mundo de las redes. Que más personas la hayan visto ahí fue el puntapié para que la convoquen a jugar el Mundial de streamers.

-¿Cómo fue ese llamado? ¿De qué se trataba ese torneo?

-Para invitarme, se contactó conmigo un chico que se llama Unicornio en Twitch. Me dijo que era en España, 10 hombres y una mujer por país, que querían que fuera, que estaba todo incluido. Yo pensé que me estaba haciendo una broma, por eso le pedí de organizar una videollamada. La hice con el representante de él, me dijo que TheGrefg, que es un streamer muy conocido y uno de los más importantes de España, quería organizar el torneo allá. Yo le dije que sí, obvio.

La agregaron a un grupo en el cual no conocía a muchos de los protagonistas, pero se la jugó y siguió con esa experiencia. Viajaron hacia dicho país y, ni bien entró a su habitación en el hotel, en la cama estaba la remera de Argentina con el número 23. "Es el número de Ponzio", pensó.

La competencia se jugó en el estadio de Betis, equipo que disputa la Liga española. Todo era un sueño para ella, que en ese momento podía cumplir. "El vestuario lo más, esperamos en el pasillo y entramos a la cancha. Ahí cantamos el himno, que en cualquier parte del mundo te da una sensación única. Tuve el placer de representar a nuestro país, que nunca pensé que lo iba a hacer. Pensé en disfrutarlo y ser feliz", detalló.

-¿Hubo un encuentro picante con uno de los mexicanos en el primer partido? ¿Cómo fue el resto del torneo y esa experiencia?

-Sí, uno le dijo a un compañero que yo no iba a hacer mucho por ser mujer. Me re enojé y después hice que me cometieran falta en el área y agarré la pelota con seguridad para patear el penal. Lo metí y lo grité con muchas ganas. Al final del partido me felicitaban por cómo había jugado. Cuando agarré el celular tenía muchos nuevos seguidores, pero demasiados. No sabía qué hacer, le preguntaba a mis amigas que siempre son las que más me hacen poner los pies en la tierra. Además con los chicos pegué muy buena onda, me hice amigos y seguimos en contacto, incluso en Qatar.

-De ahí, fuiste al Mundial ¿Cómo preparaste ese viaje?

-Desde 2019 sabía que quería ir, así que me puse a trabajar todo el día para lograrlo. Pero lo más importante fue que, en un momento justo, apareció la ayuda de mi mamá, que de una u otra forma siempre se hace presente. Con ese dinero terminé de conseguir todo para ir, y saqué pasajes para todo el Mundial, de principio a fin.

-¿Cómo viviste esa experiencia que tuviste no solo el campeonato del mundo, sino también la relación con distintas personas importantes?

-Fue una locura. Estuve viviendo con algunos de los chicos, íbamos a todos lados juntos. Me encantó porque los pude conocer por fuera de lo que son las redes, sus versiones más personales y son increíbles. Tuve la suerte de jugar un partido de fútbol con varios de ellos, otros influencers como 'Nati' Jota, los integrantes de "Nadie dice nada" y otros tantos. Hasta compartí equipo con Lali (Espósito), que es mi ídola, jugamos juntas y conectamos mucho. Además, pude ver todos los partidos de la Selección. Para la final no conseguía entrada, por contactos en común, terminé con una en mano y pude ir. Estaba en la tribuna atrás del arco donde se patearon los penales, lo viví demasiado cerca. Verlo a Messi levantar la Copa fue una sensación única, nunca lo vamos a terminar de dimensionar. Fui muy feliz.

Volvió a la Argentina campeona del mundo, con tremendos momentos, habiendo conocido gente fundamental del viaje y con muchos recuerdos. Sin embargo, la vida no para de sorprenderla. Todo el trabajo que hace a diario la llevó a, por ejemplo, realizar una publicidad en Colombia con Under Armour, para luego ser la imagen de la marca en muchos locales de Argentina. Sumó colaboraciones con otras empresas y creció como influencer y kinesióloga, trabajando ahora en un equipo de polo. Disputa nuevamente la liga de streamers y comparte equipo con Paz Zubiri, una azuleña con la que se cruzó y a quien quiere mucho. Y aunque hace de todo, siempre quiere seguir en busca de más objetivos.

"Todos los días me pasan cosas nuevas o conozco gente, pero nunca me olvido de lo mío. Siempre que puedo voy a Azul a llenarme de energía de la buena. Es súper importante recordar quién es uno y demostrar eso, que todos tenemos nuestra historia", concluyó Josefina Valicenti, quien también resaltó que es clave valorar a las amistades y a la familia, que son fundamentales en todo el proceso de la vida.