Días después de iniciada una causa penal por lo que fuera aquel episodio, al parecer relacionado con una disputa entre los presuntos agresores y la pareja por la posesión de una casa, los tres imputados habían resultado detenidos y desde aquel entonces permanecen privados de la libertad.

Ahora, a la espera de ese futuro juicio al que deberán ser sometidos. Un proceso al que, teniendo en cuenta lo resuelto desde la Alzada departamental, llegarán acusados de dos hechos considerados como cometidos "en concurso real de acciones" y definidos por el delito de homicidio simple en grado de tentativa.

Cuando el 7 de enero de 2023 la Policía hizo efectivas las detenciones de los imputados, en aquel entonces voceros ligados a lo que era la instrucción de este sumario penal -llevado adelante desde la UFI 2 a cargo del fiscal David Carballo- los habían identificado como Braian Ezequiel Crespo, Mario Rubén Crespo y Olga Alejandra Ortiz.

Respectivamente, los hermanos Crespo tienen 25 y 29 años de edad. Y continúan actualmente -con sus prisiones preventivas confirmadas en esta causa desde julio de 2023- en la Unidad 2, una de las cárceles del complejo del SPB que está en Sierra Chica.

En tanto, la madre de ambos varones, también con su prisión preventiva ratificada desde hace un año, está en la Unidad 52, la cárcel con asiento en Azul. Y actualmente esa mujer, oriunda de esta ciudad, tiene 47 años.

Apelación rechazada

Germán Vena es el defensor Particular de los tres encausados. Y en carácter de tal había presentado ante la Cámara Penal la apelación que terminó siendo rechazada y derivó en que quedara ratificada la elevación a juicio de esta causa, ordenada en un principio por Federico Barberena, el titular del Juzgado de Garantías 2.

A través de un extenso recurso, el abogado pedía ante la Alzada -que integran los camaristas Damián Cini, Carlos Pagliere (h) y Agustín Echevarría- "la inmediata libertad" de sus defendidos. También, que se revocara "por falta de mérito" la decisión ordenada en una primera instancia de convertir a esta causa penal en materia de un juicio.

En subsidio, Vena solicitaba la "excarcelación extraordinaria" de sus clientes; además de volver a plantear -sin que tampoco ahora prosperara- un cambio de calificación, a un delito menos grave, del expediente penal que los tiene como imputados a la mujer y sus dos hijos.

Al respecto, el abogado sostiene que la figura de intento de homicidio aplicada es "exorbitante y alejada de lo que realmente sucedió".

Desde su punto de vista, lo ocurrido aquel primer día del año pasado sólo se trató de "una confrontación entre vecinos" que sus defendidos no iniciaron. Una disputa -afirmó también en el recurso- donde las víctimas resultaron con lesiones que no podían ligarse a "la supuesta ferocidad" de un ataque y que por parte de sus clientes estuvieron enmarcadas en "una acción defensiva" durante "una riña" donde la pareja sufrió "heridas leves cuya curación no fue superior a los dos días".

A través de ese recurso de apelación que terminó siendo rechazado por "improcedente" en la Cámara Penal, el abogado Vena señalaba que en el hecho también intervinieron menores de edad a los que no se investigó; y que los elementos incautados durante lo ocurrido -entre los cuales figuró un cuchillo- no pertenecían a sus representados.

"Las pretensiones esgrimidas respecto de los encausados no pueden prosperar y la causa debe transitar a un juicio oral y público", escribió en lo resuelto por unanimidad desde el máximo Tribunal de Alzada departamental uno de sus integrantes: Damián Cini.

A través de lo decidido días atrás fueron desestimados todos los planteos efectuados por el abogado Germán Vena. Y en coincidencia con lo afirmado por el Juez de Garantías que intervino en el sumario, se mencionó también en esta segunda instancia que -al menos hasta el momento- estaban acreditadas "la existencia de los hechos" y "la probable autoría penalmente responsable de los causantes en los mismos" para que se desarrolle ese futuro juicio a todos ellos.

"El fallo dictado por el Juez de Garantías -referido a rechazar los sobreseimientos de la mujer y sus dos hijos y ordenar que sean juzgados- se encuentra ajustado a la normativa procesal aplicable al caso", puede leerse en un tramo de lo decidido ahora.

"El Dr. Barberena sindicó y fundó razonadamente los motivos por los cuales consideró existentes, a esta altura del proceso, elementos de convicción suficientes para remitir el expediente a la etapa de debate oral, sin que las formulaciones efectuadas por la Defensa logren conmover dicha decisión", señaló el primero de los camaristas que votó en la resolución que confirmó que Ortíz y sus hijos vayan a juicio como los probables autores de aquellos dos intentos de homicidio ocurridos el 1 de enero de 2023.

"En resumidas cuentas, el Juez no hizo más que analizar todos los elementos trascendentales obrantes en la investigación, los cuales eran conocidos por el Defensor; y, respondiendo en forma argumentada a los embates de éste, arribó a la conclusión que aquí se impugna. De lo expuesto, se advierte que la resolución resultó fundada y no se violentó la defensa en juicio", se concluyó desde la Alzada.

El dato

El 20 de septiembre de 2023 se resolvió en una primera instancia elevar a juicio esta causa, por lo que el abogado de los imputados apeló lo decidido el 3 de octubre de ese mismo año. Pero recién su recurso llegó a la Cámara Penal para que fuera tratado el 31 de mayo pasado. Esa demora en la remisión de la causa desde el Juzgado de Garantías 2 a la Alzada hizo que semanas atrás Germán Vena efectuara una denuncia donde pedía que fuera sancionado el magistrado Federico Barberena "por violación al cumplimiento de los deberes funcionales". En respuesta a esa presentación, al ratificar la elevación a juicio de este sumario se mencionó desde la Cámara que el Defensor Particular de los acusados "deberá, de así considerarlo, recurrir a las vías correspondientes" en caso de insistir con esa denuncia contra el titular de Garantías 2.

Agredieron "salvajemente" a las víctimas con "cadenas, palos, cuchillas y baldosas"

De acuerdo con lo investigado, Braian Ezequiel Crespo, Mario Rubén Crespo y la madre de ambos, Olga Alejandra Ortiz, intentaron matar a Armando Javier Andrada y Alejandra Andrea Latorre.

La pareja se convirtió en víctima de lo ocurrido durante las primeras horas del 1 de enero del año anterior en Villa Piazza Sur, en las afueras de la casa donde en ese entonces se domiciliaban. Un inmueble que -según versiones de testigos- los imputados reclamaban como de su propiedad.

Sobre las calles Guaminí y Constitución, cuando era alrededor de la hora cinco del primer día de 2023, se produjo este conflicto vecinal.

En ese sector de la ciudad vivían en aquel entonces los encausados y las víctimas de lo que a escala penal son estos dos intentos de homicidio.

En las actuaciones se menciona que Ortiz y sus hijos golpearon a Andrada y Latorre "con la intención de darles muerte". Y que para agredirlos utilizaron "una cadena, un palo de madera de un metro de largo, un hierro, un machete -similar a una cuchilla de gran tamaño- y dos baldosas".

Andrada y su concubina recibieron golpes en sus cuerpos y en sus cabezas. Y a causa de lo sucedido tuvo que intervenir la Policía; aunque recién los imputados terminaron siendo detenidos seis días después de que protagonizaran aquel incidente.

En tanto, ese 1 de enero del año pasado la pareja tuvo que ser asistida por personal médico y después hospitalizada. Y al Pintos el hombre y la mujer ingresaron en estados inconscientes, por lo que ambos permanecieron internados algunos días.

Durante el hecho, Andrada sufrió "heridas con lesiones en la cabeza y nuca, con manchas hemáticas". Y su pareja, "lesiones cortantes de las cuales brotaba sangre en la zona del cuello".

Cuando en julio del año pasado quedaron confirmadas desde la Cámara Penal las prisiones preventivas para los hermanos Crespo y la madre de ambos se mencionó que los tres "intervinieron por igual en el hecho, aplicando golpes de manera violenta en forma conjunta". Y que para consumar la agresión emplearon "cadenas, palos, cuchillos y baldosas" con los que atacaron a las víctimas "salvajemente", en "forma colectiva" y de una manera persistente. "Incluso, una vez caídas al suelo", había escrito el magistrado Agustín Echevarría en ese fallo para ratificar de manera unánime desde la Alzada departamental estas tres medidas cautelares por las que los encausados continúan encarcelados.

"La enorme violencia desplegada por los atacantes, quienes en forma coordinada y de acuerdo a un plan común lesionaron con elementos altamente ofensivos áreas corporales vitales de las víctimas" -se refería en otra de las resoluciones vinculadas con lo que fuera esta investigación penal- demostraba que los hermanos Crespo y su mamá "se representaron el resultado muerte y se desinteresaron de la realización del mismo, el cual sólo podía no acontecer producto del azar".

Los intentos de homicidio que les imputan a los tres podrían derivar, ahora que ya quedó confirmado que irán a juicio, en que reciban penas que van desde los cuatro años a los dieciséis años y ocho meses de prisión en caso de que resulten condenados.