Existe una estrecha relación entre la industria y la educación a partir del desarrollo de las nuevas tecnologías y la necesidad de capacitarse para poder, de esa manera, continuar formando eslabones en la cadena productiva. Ejemplo de ello, en nuestra ciudad, es el Centro de Formación Laboral N° 401, que actualmente dicta cuarenta y cinco oficios, y que comprenden distintas especialidades. En la semana que culmina se conmemoró el Día de la Industria y fue una oportunidad particular para abordar el tema con representantes de la institución educativa.

EL TIEMPO mantuvo una entrevista con el arquitecto Claudio Di Tomaso, instructor del curso de Armador y Montador de Paneles de Acero Liviano; y con María Marta Viciconte, secretaria del Centro de Formación Laboral N° 401.

Di Tomaso indicó que "merece ser resaltado el rol que tiene el Centro de Formación Laboral con respecto a la industria y en lo que se está enfocando. Una de las cuestiones es la capacitación especializada que tiene el Centro con las industrias locales. Por ejemplo, mi curso, además de ser innovador y de tecnología, la capacitación que tiene el curso para abarcar el sector de la industria, que hoy en día tiene más demanda que oferta laboral, es importantísimo. Las nuevas tecnologías y tendencias es algo primordial".

Al respecto, Viciconte refirió que "el CFL 401 está abocado a lo que es la formación de personas; en principio, tratando de mejorar su empleabilidad, pero también fortaleciendo las capacidades y actualizando los conocimientos en nuevas tecnologías".

"Por un lado -explicó-, se favorece que puedan desarrollar emprendimientos; pero, por otro lado, vemos que también hay un desarrollo en Azul que está latente y que es posible, en cuanto a la parte industrial, que siempre es de mucho empuje, y nuestro Centro quiere acompañar esos nuevos desarrollos que van surgiendo en Azul".

Un nuevo mundo del trabajo

La secretaria del CFL 401 subrayó que "esa es la idea: tratar que los estudiantes se vayan formando para ese mundo del trabajo nuevo, ya sea en tecnologías y también en los temas de cultura del trabajo".

En esa línea, analizó: "A veces se cree que eso se aprende en el trabajo, pero si la gente no ha tenido muchas oportunidades laborales, en contextos de trabajo reales, a veces les cuesta adaptarse. Entonces, el Centro hace ese nexo entre lo que es la formación de la persona y un posible trabajo, ayudando mucho a las empresas a que no tengan que capacitar en ciertas cuestiones que, si no, las tendrían que hacer. Muchas cuestiones, desde la cultura del trabajo, puntualidad, valores, además del uso de herramientas, responsabilidad, seguridad e higiene en el trabajo; muchas cuestiones que el Centro trata de brindarles a los alumnos".

Es por ello que, "realmente, de acuerdo a nuestra experiencia, lo que hemos visto en un montón de casos, se nota la diferencia entre una persona que pudo asistir y concluir un curso en Formación Laboral y aquella que no lo pudo hacer. Hay un valor agregado que hace que, al momento de trabajar en una empresa, esa persona se vaya a desempeñar mejor, más allá de los conocimientos".

Para Claudio Di Tomaso, sin lugar a dudas, "hay una alianza estratégica del Centro con empresas locales, con la industria local, justamente para ir capacitando gente que esa industria necesita. Por ejemplo en mi rama, de arquitectura, de tecnología de innovación en construcción en seco, nos vinculamos con nuevas empresas, por ejemplo Construcciones Piave, en una combinación con nuestro Centro, para hacer las prácticas profesionalizantes. Incluso, después la empresa se beneficia al poder contratar gente capacitada en el curso del Centro de Formación Laboral. Por eso es primordial esa alianza con la industria; es un beneficio para ambos".

De ese modo, explicó, "se van viendo qué cursos se van necesitando, en cuanto a innovación y tecnología; y la empresa se beneficia al recibir esa mano de obra altamente calificada desde nuestro curso".

Cambio de paradigma

Claudio Di Tomaso, en referirse a algunos aspectos del curso a su cargo, observó que "el sistema Steel Frame viene a cambiar el paradigma de la construcción, con nuevas tecnologías, nuevas calidades de obra, mucho más eficiente que lo que se venía trabajando anteriormente con la construcción tradicional, y por eso se trata de un área de tecnología todo lo que es construcción en seco, perfiles galvanizados. Son herramientas muy puntuales del sistema, que no se suelen utilizar en el caso de la construcción tradicional. Acá se necesitan no muchas, pero son otras herramientas en las que hay que capacitarse".

Entre otras cuestiones inherentes a la capacitación, "en el curso se hacen cálculos de estructuras, dimensionado, todo el manejo de herramientas y seguridad, y el montado de una obra. Básicamente es cómo se construye una casa desde cero hasta que quede terminada".

La importancia del COPRET

En relación al COPRET (Consejo Provincial de Educación y Trabajo), Viciconte mencionó que "hubo una reunión en julio y habrá una en los próximos meses, con otras instituciones intermedias, y se está convocando de manera puntual a varias empresas, porque esas empresas están viendo de alguna manera esta apertura que estamos teniendo y saben que pueden contar con nosotros para muchos trabajos y desarrollos que puedan ir haciendo".

Precisó, en tal sentido: "Y no sólo grandes empresas; también hablamos muchas veces de pequeñas y medianas empresas, pymes, o de instituciones, asociaciones civiles sin fines de lucro, que necesitan algún trabajo puntual y nosotros, desde el Centro de Formación Laboral, lo podemos ofrecer a través de nuestros distintos cursos".

"A nosotros, como escuela de oficios, nos sirve ese tipo de formación en un entorno real de trabajo. Ahí se van problemáticas de la realidad, se trabajan con casos puntuales y es la manera que tienen nuestros estudiantes de aprender en un contexto real de trabajo, por eso para nosotros son tan importantes esos contactos, con instituciones y empresas", refirió la secretaria del CFL 401.

Las estrategias y alianzas que surgen del COPRET, en consecuencia, son esenciales para el desarrollo de futuras capacitaciones. Viciconte indicó que, "si bien nosotros tenemos muchos talleres y maquinarias, en los entornos formativos, a veces no alcanza y estamos solicitando ayuda a las instituciones de la comunidad, en cuanto a la donación de herramientas, máquinas, insumos. Pero, la realidad es que, más allá del entorno que nosotros podemos brindar en el Centro, no se compara nunca con lo que un alumno pueda ver en un lugar de trabajo real. Por eso tratamos que a esa experiencia la tengan siempre. Y la manera es que las empresas e instituciones vengan a nosotros, o nosotros vamos hacia ellas y lograr ese contacto. Este año hemos tenido muchos contactos, por lo que invitamos a todas las empresas, de las grandes a las chiquitas, que pasen por nuestro Centro, para conocerlo. Está abierto de lunes a viernes de 8 a 12 y de 14 a 22", en la sede de Burgos 940 de esta ciudad.

Entorno real de trabajo

Viciconte expresó que las empresas "seguramente, si tienen alguna necesidad puntual de capacitación, nosotros, con nuestros cursos, podamos ayudar y para todos es poder ganar, para los profesores que pueden enseñar, los alumnos que pueden capacitarse en un entorno real de trabajo, para el Centro que puede ayudar a otras instituciones y empresas, que tienen en nosotros potenciales colaboradores".

Por otro lado, observó que "estamos hablando, además, de gente que no se forma específicamente en una rama. Por lo general, comienzan con un curso del área construcción en seco, y ven que pueden seguir con electricidad y, de esa manera, van haciendo un combo de cursos de formación. Así, en dos o tres años, muchos logran una formación que es muy integral, al tiempo que ya ha comenzado a trabajar por su cuenta".

En esa misma línea, Di Tomaso sostuvo que "algo que también notamos desde el Centro de Formación es que la industria, en particular, está sufriendo una transformación digital. La era digital no deja de ser industrialización y eso se está apoyando también a través de cursos de trabajo digital, cuestiones de marketing, desarrollo de páginas. Se trata de nuevos oficios y a muchos les pasa, al ingresar al CFL 401, que conocen cursos de oficios que no sabían que existían".

"Hoy en día -destacó, a continuación-, la educación continua es algo que noto en mis alumnos, muchos de los cuales vienen de hacer otros cursos; es decir, están todo el tiempo buscando capacitarse, porque estamos en una época de transformaciones muy rápidas. Es común que una persona que hizo el curso de albañilería hace unos años, hoy esté haciendo el curso de construcción en seco porque sabe que 'es el futuro', pero también el presente; se trata de seguir avanzando, por eso están buscando formarse continuamente. Y eso es lo que provee el Centro de Formación".

María Marta Viciconte afirmó que "es una característica del Centro, que hace que los alumnos estén en formación continua; que también tengan un aprendizaje que no es individual, sino que es colaborativo, cooperativo. De hecho, se arman equipos de trabajo, empiezan a contactarse entre los mismos estudiantes para poder desarrollar un emprendimiento".

Oficios sin prejuicios

El Centro de Formación Laboral N° 401 "está abierto, a partir de los 16 años, a todas las edades. Tenemos alumnos de todas las edades. Tampoco los cursos están asociados a algún género; nosotros los llamamos 'oficios sin prejuicios', y así tenemos hombres y mujeres en los distintos cursos que, históricamente, se asociaban a un género determinado. Hoy no sucede eso", explicó Viciconte.

"Es real que, para mucha gente, sobre todo de mediana edad, es una manera de poder reencauzar su camino laboral; también hay gente jubilada, que trabajó toda su vida en relación de dependencia y descubre que tenía habilidades y las empiezan a desarrollar. No hay límite. Es algo totalmente enriquecedor para los alumnos, no sólo por lo que se aprende en los cursos concretamente, sino porque se trabaja en grupos de una manera muy linda y a las personas les cambia el aspecto social. En el caso de personas que están desempleadas, es una posibilidad de ampliar su red de contactos. Así, se va haciendo una cadena y así se lo propicia desde el ámbito institucional. Todo eso, que conllevan los cursos, es algo muy importante para los estudiantes", indicó la secretaria de la institución formativa.

De ese modo, al observarse el recorrido institucional, Viciconte precisó que "tenemos muchos casos de éxito, de gente a la que les ha cambiado la vida y por eso nosotros estamos muy orgullosos por el trabajo que hacemos, porque sabemos que es posible mejorar la vida de las personas".

La certificación de los cursos del CFL 401 es oficial, se remarcó. "Un aspecto importante, además, es que es formación gratuita y pública. Como toda institución educativa, tenemos una cooperadora, en la que no sólo participan y colaboran los alumnos, sino también sus familias; inclusive ex estudiantes, que ya pasaron por la escuela, tienen un buen recuerdo, y siguen colaborando con nosotros", indicó Viciconte.

Actualmente "se está terminando la obra de la cocina y realmente han colaborado muchísimo. Más allá de la ayuda del Estado que podamos tener para algunas compras puntuales, más grandes, este año que es tan complicado apoyan mucho a la cooperadora".

"Nuestra matrícula de alumnos actualmente es de 800 alumnos, son 45 cursos en desarrollo; se pudo finalizar la obra de gas y estamos con la obra de la cocina. Es de destacar el trabajo de los instructores de los cursos y de sus alumnos que están participando en esta obra, ya que realmente le están aportando mucho trabajo, muchas horas de dedicación". Esa obra "va a ser una mejora muy importante para el Centro, para un área en particular, como es la de cursos de gastronomía", señaló Viciconte, finalmente.