El intendente Nelson Sombra mantuvo una entrevista con EL TIEMPO al cumplirse un año de su asunción como jefe comunal. Entre otras cuestiones, el mandatario local realizó un balance de gestión, opinó de la desaprobación del presupuesto y las ordenanzas Fiscal e Impositiva, se refirió al decreto de emergencia económica y habló sobre la relación con los gremios municipales y con el gobierno provincial.

"Ha sido un año bastante intenso"

- ¿Qué balance hace de su primer año de gestión?

- Particularmente para Azul, pero también para toda la sociedad argentina, creo que ha sido un año bastante intenso. Es la primera vez que se intenta probar un régimen político que no se había manifestado en la Argentina, cambiando todas las reglas del juego.

Durante muchísimos años la sociedad argentina venía acostumbrada a tener accesibilidad en la salud, en la educación y en muchos derechos que entendía que estaban conquistados, pero que -evidentemente hoy- cuando la opción política es otra, eso se pone en tela de juicio y de discusión.

En el contexto de esas particularidades tenemos un Jefe de Estado que manifiesta ser el topo que viene a destruir el Estado del cual es el jefe. Me parece que esas son aseveraciones complejas, como para entender que depara el futuro en la Argentina. Y Azul no escapa de esta particularidad. Ya lo hemos descripto en infinidad de oportunidades, es un Municipio que atraviesa un gran estancamiento desde hace mucho tiempo.

Más allá de las afinidades políticas que pueda tener cada uno o quienes -en todo caso- hayan conducido el Municipio, evidentemente hay algo que se desarticuló. Cuando uno piensa en el Azul del año '65 en adelante, está claro que algo se cortó. Mientras tanto otros distritos han logrado tener objetivos y prácticas políticas en común -más allá de las diferencias- para poder llevar una ciudad hacia nuevos objetivos.

No es una queja sino un análisis. Es una reflexión de las particularidades de Azul, que ya era un municipio bastante golpeado por estas cuestiones, y el hecho de que Nación haya avanzado con un 120% de devaluación, más todos los lineamientos que pretende hacer el presidente Milei, pateó aún más el tablero y es necesario recalcular.

"Tenemos mucho más para hacer"

- ¿Qué análisis hace de la implementación del decreto de emergencia económica, financiera y administrativa que impulsaron desde el Ejecutivo? ¿Se cumplieron los objetivos que se habían planteado?

- No se han cumplido en su totalidad por los idas y vueltas que hemos tenido con cada sector a la hora de plantear las dificultades que atraviesa el Municipio.

Esto es un análisis personal, pero me corresponde a mí hacerlo. Me parece que hacía rato que un Intendente no se paraba frente a su comunidad y le contaba de pies a cabeza o de la A la Z qué es lo que realmente le está pasando al Municipio y cuáles -según nosotros entendemos- son las causas por las que se llegó a esta situación.

Veremos el resultado cuando termine el decreto, pero me parece que hay que tomar la parte positiva y desde el Ejecutivo lo que hemos hecho es instalar los problemas, avanzar, ir discutiendo y tratar de alinear todos los planetas para que salga una solución, la cual -evidentemente- durante 30 años no ha llegado.

En este pasaje, a fin de año, podemos decir que el decreto sí ha sido beneficioso, porque hemos podido resolver problemas con recursos propios. Un ejemplo: la esquina de Rauch y 9 de Julio -que es un asfalto que tiene casi 70 años, que se desmoronó por el paso del tiempo y porque no ha tenido mantenimiento, lógicamente- la pudimos afrontar con recursos propios. Eso ha sido posible gracias a los "ahorros", por llamarlo de alguna manera, que logramos con el decreto, el cual no sólo tenía que ver con la carga salarial de los trabajadores sino con una impronta un tanto más profunda.

Esto nos dio un pequeño plafón, pero en lo personal creo que es muy poco. Me parece que tenemos mucho más para hacer. Y no hablo como gestión sino como comunidad. Necesitamos levantar la autoestima de nuestra comunidad. Yo comprendo que -como azuleño y no en términos personales- necesitamos tener una mentalidad un poco más ganadora si se quiere...

- ¿Eso tiene que ver con el concepto que expresó cuando ganó las elecciones acerca de que no quería escuchar más que Azul es una chacra asfaltada?

- Tal cual. Esos conceptos se arraigan cuanto más se repiten: que la gente de Azul no sé qué, que esto es una chacra asfaltada.... Hay que cambiar un poquito el chip y empezar a pensar con una mentalidad un poco más ganadora acerca de que tenemos posibilidades de crecer. No se puede jugar a perdedor todo el tiempo.

"Mucho Gre Gre y poco Gregorio"

-¿Se replanteó en algún momento si la emergencia se decretó en el momento preciso? Desde algunos sectores, gremiales fundamentalmente, se manifestó que tal vez debería haberse impulsado de otra manera.

- Eso tiene que ver con lo que mencioné anteriormente. Durante 30 años estuvieron evaluando cómo se alineaban los planetas para poder hacer algo. Nosotros tenemos una impronta diferente: vamos, lo hacemos y discutimos sobre las causas de la decisión.

Básicamente nos enfocamos en hacer para empezar a resolver los problemas. No sé si es la mejor o la peor, pero esa es nuestra impronta, la cual tiene que ver con el hacer. Hay demasiada charla; mucho Gre Gre y poco Gregorio. Eso es lo que se evidencia en esta comunidad, que se estancó y no logra volver a despegar.

Recientemente, hablando con personas unos 20 años mayores que yo, hacían el racconto -del cual tengo vagos recuerdos de mi infancia- de lo que era Azul: el centro de atracción de toda la región y de cualquier municipio. Tendríamos que ser autocríticos y analizar en qué momento esa energía y esas ganas que teníamos se cortaron.

- ¿Considera que eso depende de todos y no solamente de una gestión municipal?

- Indudablemente. Eso depende de toda la comunidad. En Azul tenemos un déficit en términos de representatividad y de continuidad de las instituciones. Evidentemente falta esa energía que tuvieron nuestros abuelos de vincularse y de tratarse. Ellos también tenían diferencias ideológicas, partidarias y de pensamiento, pero lograban consensuar objetivos en común y avanzaban hacia un fin. Eso hoy no se ve en la sociedad. Estamos viendo una comunidad que trata de diferenciarse en vez de asociarse con otros sectores y miradas para lograr objetivos en común.

Creo que en esta gestión, en estos cuatro años, el desafío va a ser profundamente cultural: cómo podemos destrabar eso que nos está paralizando.

"Es triste ver una oposición con tan poca altura"

- ¿Qué análisis hace de la desaprobación del presupuesto en el Concejo Deliberante?

- Una de las fortalezas que ha tenido nuestro proyecto es plantear políticas claras y discutirlas. No creo que pueda pasar inadvertido que durante mucho tiempo no se haya querido discutir con nadie, logrando -de esa manera- que nada se transforme. Uno asume los costos de las decisiones que toma y nosotros no tenemos problemas con eso porque estamos convencidos del proyecto político que queremos llevar adelante.

Pero una de las debilidades que me remarco -y parece que no termino de aprender- es creer que uno está dialogando con personas que están entendiendo lo que estamos hablando. Y ese es un problema mío...

- ¿No lo entienden o no lo quieren entender?

- Ahí está...sigo cometiendo el mismo error. Yo creo que no lo entienden, porque cómo no van a querer el progreso de su comunidad más allá de las apetencias políticas que tengan. Si yo fuese la oposición, trataría de construir un desarrollo de la comunidad para que si algún día le toca a mí espacio conducir el Municipio tengamos un Azul más ordenado para seguir progresando y desarrollándose; no tener la excusa de decir: "Mirá lo que me dejaron"... Y así estamos estancados, de excusa en excusa.

Nosotros tenemos una visión mucho más proactiva, que evidentemente no la hemos encontrado, porque estuvimos charlando seis meses seguidos, cuando decían que antes el problema era la forma, la falta de diálogo, el no consenso. Les dimos todo lo que exigían y pretenden un consenso sin aportar nada. ¿Cómo se construye un consenso si del otro lado no se aporta nada para interactuar? Solamente escuchan y toman nota para después armar un despacho para ver qué van a criticar. Esa es una infantilidad tremenda. Es una falta de seriedad enorme que no perjudica a un Intendente. Eso tampoco lo pueden entender, porque están perjudicando a toda una comunidad.

Eso hace quedar mal a la política, que es el arte de comunicarse para lograr un objetivo. No es otra cosa la política, más allá de que ha sido macerada durante muchísimo tiempo por poderes que tienen la intención de que la gente no se comunique y no se ponga de acuerdo para avanzar en su propio desarrollo.

Es triste ver una oposición con tan poca altura y tan poco vuelo político. Creo que -básicamente- lo que nos diferencia con esta oposición es que nosotros somos militantes políticos, mientras que ellos son militantes electorales.

- Las ordenanzas Fiscal e Impositiva siguieron por el mismo camino de desaprobación. Desde la oposición se argumentó que se eliminaba la Tasa Esencial y se creaban otras nuevas. También se habló de un impuestazo.

- Creo que tienen latiguillos marketineros. Comprendo que hay una sociedad que no puede estar todo el tiempo interiorizándose en lo que sucede. Sería bueno que se interiorice un poco más. Pero lo que hemos discutido durante seis meses es que si ellos querían el logro político de sacar la Esencial, yo no tengo problemas con eso, no soy un necio ni tampoco puedo comprender su necesidad electoral -más allá que no la comparto-, pero el espíritu de la idea era que no se toque. ¿Por qué debe haber algún sector que no aporte para la salud y la educación? Eso no lo entiendo.

Entonces, en la democracia, cuál es el punto conexo donde nos encontramos -más allá de las diferencias- para poder avanzar en términos políticos, lo cual significa conversar para ponerse de acuerdo en un objetivo y poder resolverlo. Si la salud y la educación no son puntos de encuentro... entonces sí estamos en sintonías muy diferentes. Ahí termino de comprender por qué Azul está en la situación actual. Están atendiéndoles los egos personales a algunos sectores y dirigentes de nuestra comunidad que no han logrado tener una amplitud de criterio.

"Lo que estamos haciendo es para los trabajadores"

- ¿Cómo está la relación con los empleados municipales tras el conflicto por el decreto de emergencia? ¿Y con los gremios?

- Ahí hay que diferenciar. Con los gremios hay cierta tensión, pero me parece que el acuerdo que logramos antes de fin de año tiene que ver con sincerar un montón de cuestiones que -evidentemente- ya no causan un efecto positivo en nuestra comunidad. El régimen laboral tiene 40 años; la recolección de residuos tiene 40 años; el transporte público tiene 40 años; la ordenanza de ordenamiento territorial tiene 40 años...Eso es necesario rediscutirlo y sincerar algunas cuestiones.

Respecto a lo laboral, y los gremios lo saben, los avances para los trabajadores se consiguieron a costa de acuerdos políticos para sostenerse en el poder. ¿Y después? ¿Cómo se banca lo que se ha ido logrando?

Siempre es como que se patea para adelante, pero más allá de eso hay que darle seguridad administrativa, jurídica y económica a las propuestas; sino es pura cháchara.

Por eso estamos acordando con los gremios un nuevo escalafón y que se sinceren los horarios, sosteniendo una garantía salarial, porque a nosotros nos interesa que los trabajadores ganen bien, ya que el 100% de ese ingreso va al mercado interno y no vamos a desfinanciar el mercado interno. Pero tampoco me puedo poner en el lugar porque gobierno para 75.000 personas y no solamente para 1800. Y la que nos paga el sueldo es el resto de la comunidad. Eso se ha confundido y se ha trastocado. El trabajador público, debe tener otra jerarquía, pero otra jerarquía de pensamiento, porque no depende de quién lo hizo ingresar a la Municipalidad. Lo que algunos no ven -no todos- es que también son parte de la política. Todos entraron en términos políticos.

Y con los trabajadores, particularmente, la verdad es que hay un visto muy bueno de lo que estamos haciendo, porque entienden que es para ellos, para que se sientan reconocidos, porque si una persona entra mañana con todas las categorías, todas las funciones, todas las posibilidades económicas, y al empleado que está hace 20 años en el Municipio nadie lo ve... eso no jerarquiza el trabajo administrativo ni la excelencia del empleado municipal. Esa no es una propuesta proactiva y que motive. Hoy tenemos un escalafón en el cual a los 15 años se llega a la máxima categoría... ¿Y qué hacen los otros 15 años?

Eso hay que re discutirlo y estoy dispuesto a hacerlo. Insisto, yo soy un militante político y no un militante electoral. No estoy pensando cómo me va a ir en las elecciones. Yo trato de transformar a través del proyecto político que hemos planteado.

- ¿Está garantizado el pago de los sueldos para los próximos meses?

- Los trabajadores ya cobraron cuando dijimos que lo iban a hacer. El 20 de diciembre se va a cobrar el aguinaldo. También está garantizado el pago de enero, pero en el trajín hasta que termine el decreto el objetivo y el acuerdo es tener nuevas propuestas legislativas para modificar la situación actual y para promocionar y beneficiar realmente a esos trabajadores que quieren ponerse la camiseta de Azul.

"Una gran parte de la comunidad no quiere este Azul achatado"

- Contantemente sobrevuela la idea de que la planta política municipal está sobredimensionada. ¿Considera que es así?

- Eso tiene que ver con cómo se mire la situación y con las posibilidades que tiene un Municipio. Lo que sí es cierto es que el Municipio es el mayor empleador de nuestra ciudad. Tal vez eso sea también un timbre para el privado ¿Qué pasó? ¿Por qué no creció el privado? ¿Qué pasó que tenemos un Azul sin energía? Eso también hay que plantearlo.

Nosotros podemos -si se quiere- adjudicarnos una gestión política que en lo particular nos llevo siete años: la de poder financiar un transformador. Eso sí va a cambiar la perspectiva productiva y de desarrollo de nuestra comunidad. Pero durante todo el otro tiempo ¿Nadie se dio cuenta que iba a faltar energía? ¿Cómo se iba a desarrollar Azul?

Parece que hay algunos intereses que quieren que esta ciudad siga así como está. Nosotros no queremos eso. Y esa pelea la vamos a dar.

Creo que una gran parte de la comunidad ya no quiere este Azul achatado, estanco y preservado, como dicen algunos. Una gran parte de la sociedad quiere un distrito pujante, que se desarrolle, que pueda ser ejemplo e insignia, que genere mano de obra, que prepare a sus ciudadanos para un objetivo mucho más grande que el coyuntural. Yo creo en ese Azul y también creo que esas personas están, existen y quieren crecer.

"Hablan de consenso pero no aportan una idea"

-¿Se puede renovar el decreto de emergencia económica?

- Sí, claro. Si en enero al presidente Milei se le ocurre hacer un 120% de devaluación, está claro que puede ser así. Si sale lo que pretende la oposición en lo que respecta a la Fiscal Impositiva y al presupuesto, realmente se va a complicar muchísimo la situación económica de Azul.

La inmadurez que veo en ciertos actores políticos -o que al menos se manifiestan como tales- tiene que ver con casi cogobernar o no aceptar el proyecto político que uno pone a prueba. Se pone a prueba porque después la sociedad dirá si se ejecutó o no; el Tribunal de Cuentas considerará si se ejecutaron mal o bien los gastos; y la oposición marcando cierto pulso. Pero los presupuestos se aprueban. Y si nos devuelven el presupuesto, que en todo caso nos hagan una propuesta. Hablan de consenso pero no aportan una idea. Entonces: ¿Qué es lo que hay que consensuar?

La relación con Provincia "es excelente"

- ¿Cómo está la relación con la Provincia?

- Excelente. Es más, si no fuese excelente el Municipio estaría en cesación de pago en marzo.

Más allá de la interna partidaria que tenemos -como la tiene cualquier espacio político, pero parece que la nuestra tiene otra dimensión- hay seriedad institucional a la hora de trabajar temas en común.

Después están las particularidades de un espacio tan enorme como es el campo nacional y popular, con el peronismo como columna vertebral. Pero eso no nos impide trabajar en conjunto. De hecho, es lo que estamos haciendo.

- ¿Considera que se atraviesa un tiempo en el cual los partidos políticos tradicionales tienen que repensar diferentes cuestiones ante la situación actual?

- Sí, comparto esa idea. Respecto al espacio al que pertenezco, además soy el presidente del PJ en Azul, me pregunto: ¿Qué es lo que quiere representar el peronismo? ¿Las estrategias son las mismas que en el '45?

Creo que tenemos que replantearnos cómo empezamos a hablarles a quienes queremos representar. Me parece que hay algunos conceptos que ya no son representativos. Estoy convencido de que hay que escuchar más para aplicar, modernizar, actualizar nuestra doctrina, la cual sigue vigente.

- ¿Cómo está impactando la crisis social en Azul?

- La crisis social en Azul está ligada a las políticas macro. Si las tarifas de luz, de gas y de agua aumentan; y si todo lo que tiene que ver con el orden nacional aumenta, obviamente que eso desencadena en el mercado interno y en lo productivo a nivel local. Te retraes para poder sostener tu pequeña aldea.

Como azuleño y como ciudadano, se ve la percepción que hay en la comunidad. Creo que hay una moneda de dos caras, como decía el Turco Chiodi en una de sus canciones, y que hoy sigue intacto: los que más pueden y los que menos pueden, y no logramos articular esa situación.

Después están los oportunistas políticos que van haciendo informes.

No quiero ofender a nadie, pero en qué cabeza cabe que Azul tiene el 4% de su población en situación de calle. Dicen que hay 3000 personas en situación de calle o sino que redefinan qué se entiende por situación de calle. Si se plantea, por ejemplo, que hay personas que han tenido que volver con sus padres por la situación actual, es otro tema. Pero no están en la calle. Se está construyendo sentido sobre algo que es falso.

"Integrar, desarrollar, embellecer y ordenar"

- ¿Cuántos objetivos de los proyectados ha cumplido tras el primer año de gestión?

- Insisto en un análisis del tiempo. Siempre es un proceso inagotable. Nada empieza ni termina mientras nosotros vivimos. Eso se lo digo mucho a todos los sectores y a la militancia en sí misma, porque sino la frustración está muy latente. Si una persona cree que todo se va a solucionar mientras vive, es como que no hubiese existido un mundo hacia atrás y como si no hubiese un mundo para adelante.

De entrada planteamos algunas cuestiones estructurales que había que abordar: la matriz tributaria, el perfil identitario y la poca capacidad energética. Esos tres objetivos los hemos abordado.

La matriz tributaria hay que rediscutirla todo el tiempo. El perfil identitario empezamos a construirlo con una línea de tiempo, que es el Camino al Bicentenario. La Expo Azul me parece que ha sido el mayor ejemplo y detalle de lo que pretendemos para que los azuleños se vean así mismos y que puedan incorporar todo el potencial y todos los recursos humanos que tenemos. Y la falencia energética también la hemos abordado.

De esos tres objetivos iniciales y estructurales, algunos los tenemos en camino y otros resueltos, como el del transformador.

A partir de ahí viene un proceso de construcción. Eso se amplía en ejes de trabajo mucho más concretos, los cuales tienen que ver con integrar, desarrollar, embellecer y ordenar.

En lo que respecta a integrar puedo dar el ejemplo de la discusión de la matriz tributaria, la cual tiene que ver con integrar la responsabilidad y el desarrollo de una comunidad; como así también lo que estamos rediscutiendo para que el año que viene haya un transporte público que realmente nos integre. No podemos ser un Partido con dos localidades en la cual no haya un transporte público para poder acceder. Eso lo estamos revirtiendo. Hemos hecho los estudios necesarios y vamos a llamar a una licitación, pero con las necesidades que tiene el distrito.

En materia de desarrollo, sin dudas, el pilar es la capacidad energética que podamos lograr y la articulación entre distintos actores de la comunidad para poder desarrollar.

En lo que es embellecimiento estamos trabajando fundamentalmente en los espacios públicos. Y hoy estamos teniendo la posibilidad de poder hacer algunas obras por administración. Eso nos levanta la autoestima como gestión y ojalá que la comunidad lo pueda ver de esa manera.

Y lo que tiene que ver con el ordenamiento es un concepto mucho más amplio porque se relaciona con los regímenes laborales y con mucha legislación que ya no se puede aplicar y necesitamos hacerlo.

"Acá no hay ni buenos ni malos, son etapas"

- Existía la posibilidad de que haya cambios en el gabinete. ¿Eso ya está oficializado?

- Sí, un cambio. Ya está hablado con Nicolás (Tumminaro, quien ejercía el cargo de secretario de Desarrollo Productivo Local, Arraigo y Empleo) y creo que él se encargó de plantearlo. Tiene que ver con etapas. Acá no hay ni buenos ni malos. Uno va abordando, planteando y viendo en sus funcionarios hasta donde pueden hacerlo o no. No se trata de sostener por sostener. El que participa en política debe saberlo claramente: nadie es imprescindible. Llegan momentos, etapas, cambios de juego y se avanza. No es más que eso.

-¿Ya está designado su reemplazante?

- Sí, venimos hablando con Carlos Pagano, pero esto se va a oficializar a partir de enero. Lo hemos rescatado por las intervenciones que ha tenido, por los programas que ha propuesto y -fundamentalmente- por el desarrollo de la Expo Azul, donde logramos cumplir el objetivo que pretendíamos. Se dieron las charlas y las discusiones necesarias y teníamos a toda la comunidad productiva presente, desde el que vendía una pulsera por 200 pesos hasta el que vendía una cosechadora por 2.000.000 de dólares; y se podían articular. Ese objetivo fue logrado y creo que tiene potencial como para abordarlo. En caso de que nos equivoquemos, buscaremos otra opción.