MARÍA CRISTINA GUZMÁN

MARÍA CRISTINA GUZMÁN

"El diario fue atrapante y dejó marcada mi vida"

Ingresó como tipeadora en diciembre de 1981 y, de manera ininterrumpida, trabajó en el matutino local durante treinta y dos años. Para cuando se jubiló formaba parte de la Sección de Corrección. Y al mismo tiempo, se desempeñaba como representante gremial de los trabajadores gráficos. "Al diario lo amé tanto como para no dejar de ir a trabajar hasta cuando estaba enferma. Pero fue tanto lo que lo quise como ahora lo es que pasó al olvido", reflexiona "Cris" en una entrevista donde recorre su vida, intensamente ligada a ese grupo de mujeres y hombres del que formara parte en el matutino local y que en algún momento se diera en llamar "la familia tiempista".

10 de julio de 2023

Entrevista y nota:

Fabián Sotes

De la Redacción de EL TIEMPO

Un día, ya jubilada de EL TIEMPO, María Cristina Guzmán se encontró en la calle con Néstor Juvenal Ronchetti.

"Bocho" había sido su empleador durante los últimos años que ella estuvo en el diario formando parte de la sección de Corrección, lo cual sucedió hasta que en agosto de 2013 se retiró de la actividad.

De aquel encuentro casual con el ya fallecido escribano en la vía pública fue testigo Eduardo Cánepa, el marido de la protagonista de esta nota, quien después también moriría, en 2018.

"A 'Bocho' me lo encontré en la librería que estaba en 25 de Mayo y Belgrano. Yo estaba con Eduardo, él me vio, me saludó, me preguntó cómo andaba y me dijo: 'Le voy a hacer una pregunta. ¿No extraña el diario?'. Yo me acuerdo que lo miré y le respondí que no, que no extrañaba para nada. Y después le dije: 'Ahora estoy dedicada a mis nietos, es otra vida la que tengo'".

El escribano, que durante algunos años estuvo también en la Dirección del matutino local, pareció comprenderla con esa respuesta que Cristina le dio en aquel momento.

Esa mujer no era alguien que había dejado atrás más de tres décadas de trabajo en el diario de Azul de una manera traumática o cargada de rencor. En realidad, era una persona que en ese entonces había entendido absolutamente todo. Una mujer que, en ese transitar por una vida que hoy -a sus setenta años de edad- la tiene más esplendorosa que nunca, también supo que su paso por EL TIEMPO, como ella misma lo afirma, "fue atrapante"; aunque después "pasó al olvido" por formar parte de una etapa que ya no existe.

De esa manera, Cristina se permitió hacer un espacio en su vida para que nuevas historias fueran apareciendo y lograran traerla hasta este presente donde, por sobre las cosas, se la ve inmensamente feliz.

Motivos para eso le sobran: sus dos hijos -ya con respectivas familias y profesiones que continúan desarrollando desde los lugares donde actualmente están radicados, uno en La Plata y el otro en Mar del Plata-; los cuatro nietos que tiene y hasta haber formado otra pareja son motivos que sirven de sobra para evidenciar este momento de "Cris", a quien esa sonrisa que siempre exhibió parece brillarle más que nunca ante este presente cargado para ella de tantas buenas nuevas.

"El diario para mí fue atrapante y dejó marcada mi vida. Y lo amé. Lo amé tanto como para no dejar de ir a trabajar hasta cuando estaba enferma; que seguía yendo igual, porque lo quería. Pero fue tanto lo que lo quise como ahora lo es que pasó al olvido", reflexiona desde su casa en una charla donde traerá del baúl de sus recuerdos todo lo que para ella fue formar parte del staff de EL TIEMPO durante treinta y dos años de manera ininterrumpida.

La historia de "Cris" y su llegada al diario

Cristina Guzmán tenía tan sólo 19 años de edad cuando se casó con Eduardo Cánepa, lo cual sucedió no mucho tiempo después a que terminara la Secundaria en la ex escuela Normal.

Su primer trabajo, como encargada de personal y a pesar de que era extremadamente joven, fue en la sede que en Azul tenía Obras Sanitarias de la Nación.

Después de aquella primera experiencia laboral -ya siendo mamá de Javier, que tenía cuatro años, y de Ariel, de tan sólo ocho meses- con Eduardo decidieron mudarse por cuestiones laborales a Puerto Madryn.

El por entonces esposo de Cristina trabajaba también en Obras Sanitarias y su función lo llevó a su familia y a él a radicarse en el Sur del país.

Pero años más tarde regresaron a la provincia de Buenos Aires. Y en un principio, porque al marido de Cristina -que había nacido en Pergamino- le gustaba, se fueron a vivir a Mar del Plata.

En esa ciudad de la Costa Atlántica ya estaba viviendo el papá de ella, que en aquel entonces tenía un comercio.

De izquierda a derecha, "Pirucha" Verger, Cristina Guzmán, Flavio "Mandarina" Ferrari y José "Pepe" Tisot, ambos ya fallecidos. Y también, sentado, está Sergio Clavellino. Todos ellos eran parte del staff de EL TIEMPO en esa imagen, que data de octubre de 1986.

Pero después, víctimas del accionar de José Martínez de Hoz como ministro de Economía de la Dictadura, se hizo imposible seguir viviendo en Mar del Plata para todos ellos. Y regresaron a Azul, "con una mano atrás y otra adelante -afirma Cristina- y ahí empecé a trabajar en el diario".

Con relación a su llegada a EL TIEMPO, no se olvida que en mucho tuvieron que ver las gestiones que hicieron Ricardo "Chiflete" Valicenti, otro ex empleado de este diario, y Miguel Ríos. Este último, quien en vida fuera pareja de la también ya fallecida médica María del Carmen Ruiz, era primo de Cristina.

En ese tiempo, principios de los años '80, Ríos trabajaba en Pregón, donde también lo hacía "Chiflete" Valicenti.

Ambos eran linotipistas en el desaparecido diario de la familia Gonta. Y entre los dos, lograron que ella consiguiera una entrevista en EL TIEMPO, con la idea de poder ingresar a trabajar al matutino local.

Cristina recuerda que su papá la acompañó a aquella entrevista de trabajo. Y que luego de hablar con Héctor Títolo -durante mucho tiempo el jefe de Taller del diario- finalmente se convirtió en una integrante más del plantel tiempista.

A Guzmán la probaron para tipear. Y su ingreso se produjo el 9 de diciembre de 1981; aunque recién meses después sería contratada de manera efectiva.

En un principio le tocó reemplazar durante las vacaciones a quien luego se convertiría en una de sus amigas en el diario: "Pirucha" Verger.

Una de las primeras imágenes que tiene Cristina de su llegada a EL TIEMPO se relaciona con que, a pocos días de haber empezado a trabajar, la histórica linotipo dejó de funcionar.

"Cuando vi la linotipo me quedé tan sorprendida que no entendía cómo hacían para escribir en esa máquina. Estuve como dos horas viéndolo a Durán -Reynaldo, quien después, al igual que ella, pasaría a la sección de Corrección- trabajando en la linotipo".

María Cristina Guzmán fue otra de las que tipeó infinidad de centímetros de materiales periodísticos en las famosas "Execuwriter", las máquinas que reemplazaron a la linotipo que todavía está en la planta baja del diario y cuyo último "ejecutante" de la misma fuera el mencionado Durán.

En esa labor, "Cris" compartió en un principio tareas con la ya mencionada "Pircuha" Verger. También, con Marcela Ronchetti y Felicitas Beatriz Ramognino. Y no se olvida que, no bien ingresó al diario, a los primeros que conoció fueron a Carlos Battafarano, "que falleció muy joven", y a Cristina Cristino, "que entre los dos armaban los avisos".

"A ella fue a una de las primeras que conocí en el diario. Una muy buena persona que estuvo durante un tiempo y después se fue", afirma. Y de esa época inicial menciona a José "Pepe" Tisot, también ya fallecido y quien -durante su larga estadía en EL TIEMPO- hizo absolutamente de todo, teniendo en cuenta que fue desde canillita a armador de avisos, entre otras varias actividades.

"Siempre trabajábamos de noche. Entrábamos a las siete de la tarde y nos quedábamos hasta el cierre del diario", recuerda sobre su época como tipeadora. Un oficio que aprendió de otro ex compañero de tareas tiempistas que falleciera años atrás: Juan Maletta. El mismo que, antes de que se jubilara, también le enseñó a Cristina a usar una de las "Execuwriter" para armar los títulos en los tamaños de tipografías que habitualmente se utilizaban en EL TIEMPO cuando todavía se imprimía en formato sábana.

Elva Gratas Abot estaba como correctora por aquel entonces. Pero al mismo tiempo formaba parte del plantel de periodistas del diario, entre los cuales Cristina menciona - de esa primera época suya en el matutino- a Miguel Oyhanarte, Alberto Clavellino, Mario Vitale, Miguel Correa, Rubén Boggi, Miguel Toledo y a los que fueron apareciendo tiempo después: Carlos Comparato, Ángel Raco, Marcial Luna, Luis Librandi, Juan Lambusta y Daniel Puga, entre otros.

Como fotógrafos estaban Antonio Tamburo y José Berger. Y en algunas ocasiones aparecía por el diario Héctor "el Flaco" García, según recuerda ella ahora.

"Esa fue la época buena del diario, que vendía unos cinco mil ejemplares por día", rememora sobre aquella etapa donde, al mismo tiempo, el trabajo de las tipeadoras era bastante riguroso y exigente, a tal punto que "tenías que pedir permiso para levantarte de la silla para ir al baño"; medían en centímetros la cantidad de sus producciones diarias y eran factibles de ser sancionadas en caso de que cometieran errores.

Tipear las necrológicas, revisar durante algún tiempo los avisos publicitarios y después pasar a formar parte de la sección de Corrección, hasta que se jubilara, fueron también tareas que Cristina desarrolló en EL TIEMPO.

Además, en los últimos años laborales tuvo una activa participación como representante del gremio de los trabajadores gráficos, formando parte de la comisión directiva de esa entidad que tiene su sede regional en Olavarría.

Su desempeño como dirigente gremial seguramente haya estado relacionado con los varios años de militancia de su papá Ángel Oscar Guzmán. Hoy de 96 años de edad, décadas atrás fue Secretario General de la Delegación Azul de la CGT y también fundador y luego presidente -en la década del '80, cuando el país volvió a la democracia- del Partido Justicialista local.

Esa actividad sindical que llevó adelante desde el diario no hizo mella en su relación con la patronal, entre los cuales menciona muy especialmente a Alfredo Ronchetti.

"Gracias a la categoría que Alfredo me puso cuando me retiré es que tengo la jubilación que tengo", reconoce ahora. Y también destacó lo que hizo el Director de EL TIEMPO una vez que uno de los hijos de ella tenía que tomar la Comunión: "El responsable del Jefe de Taller no me quería dar el día. Entonces, bajé hasta la oficina de Alfredo, hablé con él y me terminó dando una semana de licencia".

De Alfredo Ronchetti, además, recuerda que cada vez que había elecciones él la escogía para formar parte de su equipo de trabajo en el diario. Y entre los dos, mesa por mesa, iban cargando el resultado del escrutinio. "Yo trabajé siempre con Alfredo en las elecciones. Él me dictaba y yo escribía, mesa por mesa, con él a mi lado. Y sabíamos si había o no algún error porque él era una luz. Sumaba en el acto la cantidad de votos y enseguida se daba cuenta".

"La familia tiempista"

"En el diario yo me sentí parte de una familia. Esa 'familia tiempista' de la que hablaba Miguel Oyhanarte es verdad que existió. Y hay compañeros con los que hasta el día de hoy sigo teniendo contacto: Sergio Robledo, Daniel Puga y su esposa Susana Arrubia, Ángel Raco, Miguel 'el Gaucho' Lara...", afirma Cristina.

"La 'familia tiempista' existió. Éramos uno para el otro por si a ese alguien le faltaba o le pasaba algo", dice. Y también pone especial énfasis en diferentes vínculos de amistad que todavía mantiene con quienes fueron sus compañeros de trabajo.

"Susana Arrubia es para mí como la hermana que no tuve. Ella y su esposo Daniel Puga, cuando quedé sola por la muerte de Eduardo, durante todo un año me venían a buscar sábado tras sábado para que fuera a cenar con ellos. Y los domingos venían para llevarme a dar una vuelta. Ellos fueron mi pilar en ese momento", recuerda.

En ese mismo sentido destaca a Sergio Robledo, su ex compañero en aquello de tipear notas y quien después -antes de pasar a dedicarse de lleno a su labor como empleado en el Poder Judicial- también formó parte del área de Armado de EL TIEMPO. "Sergio, en la época de la pandemia por el Covid, me hacía todos los mandados y después me dejaba las cosas en el garaje. Cuando lo conocí en el diario enseguida nos hicimos como hermanos. Estábamos sentados uno al lado del otro, los dos tipeando".

Durante la charla, Cristina Guzmán tuvo también palabras muy elogiosas para con Mario Vitale, otro de los periodistas más reconocidos de EL TIEMPO.

"En el diario yo me sentí parte de una familia. Esa 'familia tiempista' de la que hablaba Miguel Oyhanarte es verdad que existió. Y hay compañeros con los que hasta el día de hoy sigo teniendo contacto", afirma Cristina. FOTO: NACHO CORREA

Estando ya retirado de la actividad, en época de pandemia, Mario le hizo llegar varios presentes de Boca Juniors al mayor de los nietos de "Cris": Juan Simón, un fanático del xeneize como el mencionado Vitale, quien durante varias décadas estuvo a cargo de la Sección Deportes en el matutino que hoy ya tiene noventa años de vida.

"A mí me encantó trabajar en el diario. A tal punto que cuando regresé a Azul me volvieron a llamar de Obras Sanitarias y yo no quise ir porque ya estaba en EL TIEMPO", reconoce ahora; que ya "di vuelta la página de mi vida" ligada al matutino local, de donde "anhelaba jubilarme porque Eduardo hacía cinco años que ya lo estaba y queríamos disfrutar". Y confiesa que "lo hicimos, porque nacieron nuestros nietos y nos pasábamos viajando para ir a verlos a La Plata y a Mar del Plata, donde están radicados nuestros dos hijos con sus respectivas familias".

Después de que su marido, con el que estuvo casada durante 45 años, falleciera en 2018, María Cristina Guzmán admitió que fueron momentos muy duros los que le tocó atravesar a causa de su ausencia.

"No fue fácil recuperarme de su pérdida. Pero después fue otra página más la que empecé a escribir. Tenía que apostar a la vida y no quedarme en el tiempo. Y fue una cosa increíble lo que pasó, porque nunca me imaginé ni pensé que iba a reencontrarme luego de tanto tiempo con alguien que había sido mi primer novio. Pero pasó", reconoce invadida por una sonrisa que hace percibirla plenamente feliz por este momento que vive, gracias a la aparición nuevamente en su vida de Juan José.

Cristina, tras haberse jubilado, nunca volvió a pisar el diario que fue su segunda hogar durante más de tres décadas. "Me dio mucha tristeza cómo estaba y sentí que mi tarea ahí ya estaba cumplida. Ahora, cuando paso por la puerta del diario y lo miro, sólo pienso en los hermosos momentos vividos", dice finalmente.

Comparte tu opinión, dejanos tu comentario

Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

Locales

Acto por el 208° Aniversario de la Declaración de la Independencia

06/07/2024

El Municipio de Azul recuerda que el martes se realizará el acto protocolar y desfile cívico, militar y tradicionalista por el 208° Aniversario de la Declaración de la Independencia. El mismo se desarrollará desde las 15 horas en Av. Perón entre Av. 25 de Mayo y Burgos. leer mas

País

05/07/2024

País

País

Un 35% de las personas con trabajo son pobres, mientras que crece la desocupación

FALLO DE UN JUICIO ABREVIADO

05/07/2024

FALLO DE UN JUICIO ABREVIADO

FALLO DE UN JUICIO ABREVIADO

Pena de trece años de prisión para el autor del asesinato de un azuleño

El homicidio había sucedido en Olavarría en enero de 2021 y el joven que resultara víctima estaba a punto de ser padre. Luego de una confrontación verbal, el encausado le disparó con una carabina que nunca pudo ser hallada.

AGENDA CULTURAL

05/07/2024

AGENDA CULTURAL

AGENDA CULTURAL . Qué hacer en los próximos días

GONZALO RODRÍGUEZ

ESTARÍA OPERATIVA EN UN MES

05/07/2024

ESTARÍA OPERATIVA EN UN MES

ESTARÍA OPERATIVA EN UN MES

Donaron un nuevo autobomba para el Destacamento de Bomberos de Azul

DESDE EL CONCEJO DELIBERANTE

05/07/2024

DESDE EL CONCEJO DELIBERANTE

DESDE EL CONCEJO DELIBERANTE . Ante el estado de abandono, piden informes al Ejecutivo sobre las "estructuras urbanas"

EFEMÉRIDES

Locales

04/07/2024

Locales

Locales

Militar azuleño recibió al presidente Milei en San Juan

El presidente Javier Milei realizó hoy una visita a la provincia de San Juan con el objetivo de realizar el lanzamiento oficial del Compromiso Federal por la Alfabetización.