Desde la Cámara Penal quedó confirmada la prisión preventiva para un hombre que a fines de febrero pasado había sido detenido en Chillar, medida ordenada en ese entonces por ser considerado el autor de un hecho de abuso sexual cometido en perjuicio de una menor de edad.

Un recurso de apelación que no prosperó en segunda instancia, formulado desde la Defensa Oficial que patrocina al imputado en esta investigación penal, se tradujo en que los miembros de la Alzada departamental con asiento en el tercer piso de los tribunales de Azul ratificaran la vigencia de esa medida de coerción, informaron fuentes judiciales a EL TIEMPO,

En lo resuelto por los camaristas Damián Cini, Carlos Pagliere (h) y Agustín Echevarría de manera unánime al confirmarse esta prisión preventiva, el hombre investigado continúa siendo señalado como el probable autor del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el aprovechamiento de la situación de convivencia preexistente con una menor de dieciocho años de edad.

Bajo esa misma calificación penal el presunto abusador había sido detenido en Chillar, durante un procedimiento que agentes de la Subcomisaría con asiento en esa vecina localidad perteneciente al Partido de Azul realizaran en las primeras horas del pasado domingo 26 de febrero.

En aquel entonces, voceros ligados a lo que fuera la detención del hombre que continúa privado de la libertad lo habían identificado como José María Farías, de 59 años de edad.

Tanto la detención como lo que posteriormente fue la prisión preventiva del imputado, la medida cautelar que recientemente fuera confirmada desde la Cámara Penal, habían sido ordenadas por Federico Barberena, el magistrado a cargo del Juzgado de Garantías 2.

Esa presentación que terminó siendo desestimada por "improcedente" desde la Alzada incluía un pedido para que fuera revocada la prisión preventiva del imputado y, también, un cambio de calificación de esa causa penal -al delito de "abuso sexual simple agravado"- que lo sigue teniendo privado de la libertad.

Pero ninguno de los argumentos esgrimidos desde la Defensa Oficial del acusado prosperó en esta segunda instancia. Algo que, en consecuencia, se tradujo en que quedara ratificada la vigencia de la medida de coerción por la que el presunto abusador continúa preso, al aguardo del juicio al que deberá ser sometido en el marco de esta causa que desde la UFI 6 instruye la fiscal Karina Gennuso.

Todavía se aguarda por el otorgamiento de un cupo desde el SPB para el traslado del chillarense a una cárcel de la zona, luego de que en un principio estuvo alojado en la Subcomisaría de Cacharí y actualmente permanece en la Estación de Policía Comunal de General Alvear, según lo informado ayer a este diario.

Una menor que tiene ocho años

Al igual que fuera sostenido en una primera instancia, para los jueces de la Cámara Penal existen elementos que demuestran la autoría de José María Farías en ese hecho de abuso sexual que le continúan atribuyendo a título de autor.

Al respecto, en lo resuelto ahora se hizo alusión a la existencia de aquel episodio delictivo, que temporalmente es situado como ocurrido durante los primeros minutos del pasado 25 de febrero en un inmueble de Chillar donde el hombre que sigue preso convivía con la presunta víctima: una nena que tiene ocho años.

El abuso, se mencionaba en estas actuaciones penales, incluyó que Farías sometiera a la menor mediante tocamientos y que la accediera carnalmente con sus dedos, "acción que desplegó aprovechando la situación de convivencia preexistente con la niña", se indicaba textualmente en la causa.

La madre de la nena fue quien denunció a Farías, luego de que circunstancialmente se convirtiera en testigo presencial de lo ocurrido con su hija en la cocina del referido inmueble.

Tras la denuncia que radicara en la Subcomisaría de Chillar se inició desde la UFI 6 de Azul la investigación penal que posteriormente derivó en la detención del hombre que sigue preso.

En esa presentación que hiciera, la mujer no descartó que en aquella ocasión en que este hecho se produjo no haya sido la primera vez que el imputado cometía un episodio de las características mencionadas.

Luego de instar la acción penal, la mujer había llevado a su hija al hospital municipal de Chillar para que un doctor la revisara, algo que posteriormente se convertiría desde la Acusación en un elemento probatorio más -teniendo en cuenta lo que fuera el resultado de ese análisis médico a la menor- para dar por demostrada la autoría en este hecho de abuso sexual del hombre para quien recientemente quedó ratificada su prisión preventiva.

"La cautelar dispuesta -mencionó en lo resuelto el camarista Echevarría al aludir a la situación del encausado- resulta necesaria a los fines de aventar los peligros procesales de elusión de la justicia y la misma resulta proporcional, sopesando el tiempo que lleva privado de su libertad en relación a la pena en expectativa que se desprende del tipo (delito) endilgado".

El dato

Otra evidencia de peso colectada en las actuaciones penales para dar por demostrada hasta el momento la autoría del investigado en este caso de abuso sexual había surgido del testimonio tomado a la menor y presunta víctima por medio de la Cámara Gesell. A través de sus dichos, la nena señaló a Farías como el autor de aquel episodio delictivo, refiriendo también las características que tuvo ese abuso cometido por el encausado.