21 de julio de 2020
La construcción pertenece a la pareja conformada por la mexicana Lucy Aldana y el azuleño Juan Manuel Ulloque, quienes, con mucho esfuerzo, levantaron la edificación con sus propias manos. Costó 150.000 pesos, aproximadamente. El predio donde está ubicada la casa no cuenta, aún, con el servicio de luz.
Por Laura Méndez
De la Redacción de EL TIEMPO
El sueño de la casa propia se ha convertido en una utopía para algunos, no en cambio para otros. Aunque no deja de resultar costoso construir una casa o comprar directamente, pero sabemos que la mejor inversión es en ladrillo.
Ocurre que hay gente que antes que pagar un alquiler porque se les imposibilita económicamente debe y quiere vivir bajo su propio techo.
Pero entonces ¿hay posibilidades de tener un hogar propio digno sin recurrir al ladrillo?. Sí, ya hay por lo menos tres casas en Azul edificadas de adobe con la técnica llamada Quincha.
EL TIEMPO estuvo en una de estas casas, donde además se utilizaron materiales reciclables.
Esta pareja de jóvenes dueños y hacedores de la casa en 7 meses hicieron el cuarto para vivir allí, y en el término de 1 año y medio más quedó tal como está ahora.
Claro que ellos cuando pueden (el clima no ayuda), trabajan porque faltan culminar detalles.
La Quincha se utiliza mucho en zonas nórdicas del país, donde hay sismos porque las paredes son flexibles.
En esta casa las paredes están construidas con botellas de vidrio, en este caso le colocaron de color por una cuestión decorativa. La estructura se realizó con palos de luz y los muros de palets, el piso es de machimbre de 1 pulgada (el más grueso), aunque en la parte donde está la salamandra hay laja. Tiene una ventana circular que es una rueda de carro que estaba tirada en el campo y el resto de las aberturas, en su mayoría, son recicladas.
Afuera hay un horno de barro y tienen su propia quinta.
Claro que la pareja que concretó esto lo que en principio era un proyecto le puso mucha "garra". Es decir además de buscar la manera de conseguir los materiales, tuvieron que estar horas bajo el sol y frío trabajando en esta construcción.
La pareja en cuestión está conformada por la mexicana Lucy Aldana y el azuleño Juan Manuel Ulloque.
Ella hace tres años y medio que está en Azul y contó parte del desarrollo de lo que se iba a convertir en un hogar sumamente cálido y acogedor.
Las paredes llevan además del adobe, palets y botellas de vidrio. La estructura está realizada con palos de luz nuevos.
Una particular construcción
En principio, Lucy manifestó que "mi novio tenía ganas de hacer una construcción de este tipo porque mi suegro tiene una similar en un rancho en el campo".
Insistió en que "así que él tenía, en principio, el proyecto de hacer este tipo de casa, no solamente por cuestiones económicas sino que por la humedad porque estas casas son sumamente secas y la realidad es que Juan Manuel sabía que los dos lo podíamos hacer solos, más allá de que tuvimos colaboración de amigos".
"Entonces en siete meses construimos esta casa, no toda porque comenzamos por la habitación. Así que primero elegimos la parte de atrás del terreno porque está en un nivel más elevado que el resto, rellenamos y empezó el trabajo de los cimientos".
En cuanto a esto último explicó que "la base tenía que ser fuerte, es decir la idea de que hiciéramos una buena cimentación tenía que ver con el techo porque utilizamos lo que se denomina techo verde, lo que implica que sostenga mucho peso. Es decir se rellena con tierra, con capas de material tipo silo bolsa y más arriba se lo coloca pasto o suculentas o que uno quiera".
Entonces manifestó que "además permite contar con un excelente aislamiento del frío y calor. Todavía el techo está sin terminar".
En definitiva las paredes llevan palets y arriba postes telefónicos hasta el techo. A partir de ahí comenzaron a levantar las paredes. "Lo de las paredes es una técnica que se llama Quincha, lo que hace que la pared sea muy flexible, este tipo de construcciones está pensada para zonas donde hay sismos", advirtió.
Agregó Juan Manuel que "hay casas de este estilo que están elaboradas con arcilla, nosotros utilizamos tierra negra común, mezclada con paja de avena, de cebada, cualquiera funciona o pasto común. Esa mezcla lleva agua y tierra y ya está. Así es que fuimos rellenando hasta que se seque y quedó como está ahora, uno después puede pintar o no".
Consultada sobre si decidieron construir un ambiente para ingresar a vivir, Lucy lo confirmó.
"Nosotros hicimos la pieza para vivir y después fuimos ampliando con más ambientes", sostuvo.
El reciclado
En segundo lugar, los chicos especificaron la función de los materiales reciclados.
Enumeraron "las botellas fue por un tema de aislación, más botellas tienen, más aislamiento disponen. Quisimos que algunas estén a la vista. La idea fue utilizar el mayor reciclado que pudimos. La puerta y algunas de las ventanas son recicladas también".
Muchos de los materiales lo compraron, otros se los regalaron sus amigos a medida que se iban enterando que Lucy y Juan Manuel estaban construyendo su hogar.
De manera constante, durante el tiempo de arduo trabajo Lucy y Juan Manuel iban todos los días a trabajar.
"Teníamos que avanzar", destacó Lucy.
Cuestiones como la instalación de los servicios, por ejemplo la luz es algo que no está resuelto aún.
Al respecto, Juan Manuel puntualizó que "tenemos amigos que nos tendieron una mano, claro que no tenemos gas y la luz no llegó nunca. En la zona hay dos manzanas donde están construyendo casas y no hay ni luz en la calle. Es decir somos muchos los vecinos y el cableado está en las dos manzanas, falta que se habilite la luz, no sabemos de donde proviene el problema. El tema que hay mucha gente que vive en esta zona y ¡no tenemos luz!".
También contó que durante el verano la casa es muy fresca.
De hecho, ahora en invierno, "tenemos que apagar la salamandra porque días como hoy (por ayer) para dormir tenemos mucho calor. Es que las paredes son anchas y tienen, como decíamos, buena aislación. Los días cuyo termómetro marca la temperatura bajo cero nosotros andamos de remera", culminó diciendo Lucy.
EL DATO
En Tandil y Olavarría hay muchas casas con estas características. Ésta en particular costó 150.000 pesos, aproximadamente.
La construcción cuando recién arrancaba.
Si llegaste hasta acá es porque buscás historias locales, ayudanos a seguir contándotelas. SUMATE A EN|COMUNIDAD.
COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.
Organizado por el Municipio de Azul el próximo miércoles 30 se realizará un nuevo Encuentro Regional de Cultura, organizado por el Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires. El evento tendrá lugar en el Teatro Español, a partir de las 10, con acceso libre y gratuito.
25 de abril de 2025
25 de abril de 2025
El episodio de violencia de género que derivó en femicidio ocurrió el domingo pasado.
25 de abril de 2025
25 de abril de 2025